TW
0

El belga Diederik Foubert, un antiguo ciclista profesional, se ha convertido en un fijo en las citas con las pruebas mallorquinas de ciclismo máster. Acompañado de su rubia esposa y dos hijos pequeños no han fallado a ninguna de las semanas internacionales llevadas a cabo estos últimos años.

Ayer, en un terreno en el que se mueve a la perfección, logró un nuevo triunfo para su ya poblado palmarés: «cada año me preparo a tope para llegar en condiciones a Mallorca. Son unas carreras que me gustan mucho y además cuentan con el aliciente de poderte enfrentar a los mejores ciclistas del pelotón internacional».

El único isleño que destacó en la jornada de ayer fue Xisco Nebot, que estuvo en el grupo cabecero en la carrera de los más jóvenes: «antes de afrontar el segundo ascenso a las cuestas de Capdellá ha habido bastantes ataques y se ha formado un grupo de 16 corredores. El problema es que apenas había entendimiento y se iba a tirones, lo que ha provocado que el grupito se volviera a romper en dos».