TW
0

79 DRAC INCA: Cabral (22), Stacey (7), Montañana (12), Villar (13), Stuckey (16) "cinco inicial", Edu Sánchez (0), Mons (2), Crespo (2) y Merino (5).
75 BADAJOZ:Marcos (5), Chanca (16), Lisard González (16), Oriol González (0), Murray (8) "cinco inicial", Fernando González (0), Sotomayor (6), Blake (21) y Lombilla (3).
Arbitros: Mauri Roldán y Falcón Martínez (Colegio catalán). Sin eliminados. Sancionaron con una falta técnica a Martín Fariñas y una antideportiva a Alexis Lombilla.

ALBERT ORFILA
Salió cara. Drac Inca levantó su cita ante el colista de la Liga lanzando una moneda al aire, aunque también agarrándose al instinto ganador de Willy Villar y Miguel Angel Cabral. El primero ejecutó al Badajoz consumiendo los últimos diecinueve segundos de partido y forzando una situación de uno contra uno que volteó el marcador (77-75) y selló el triunfo; el segundo fue quien resucitó al grupo de Abós cada vez que el Badajoz acariciaba la fractura. El partido fue un esperpento, pero la carga de emotividad que sirvió el último cuarto acabó mitigando treinta minutos insoportables.

Drac Inca acumuló demasiados problemas en el ataque estático y su baloncesto fue intermitente. Erró situaciones icomprensibles y su línea exterior vivió durante un buen tramo del partido en la más absoluta espesura. Murray dejó claro porqué tiene los días contados en Badajoz, pero la permeabilidad de la defensa local "el cuadro extremeño se hartó de penetrar y doblar" y la clarividencia de Lisard González, John Blake y David Chanca fueron suficientes para desquiciar al grupo de Abós y arrebatarle el control del partido. Expuso el Inca un buen volumen defensivo, pero casi nada surtió efecto. En el minuto 16 el Palau cruzaba los dedos: 20-28. Stacey contemplaba el juego desde el banquillo y cargado de faltas (3) y las prestaciones de Stuckey en ataque rozaban la mediocridad. Tuvo que aparecer Miguel Angel Cabral para reparar los daños. Una bandeja y dos triples consecutivos conectaron de nuevo a su equipo (29-31), que lograba alcanzar el descanso un punto arriba (37-36).
Drac Inca seguía dejando demasiados cabos sueltos y en el tercer cuarto volvió a sangrar la herida. Un parcial de 16-25 disparó de nuevo la renta visitante a los 8 puntos (53-61) y el cuadro mallorquín empezaba a ahogarse. Cabral resistía, pero el Badajoz también. El partido se escurría, aunque Villar dejó claro que podía ser el hombre del partido. Dibujó un triple y Badajoz se vió colista (71-73). Segundos después (-19**) asestaba un golpe definitivo (77-75) que Stuckey decoraba con otra canasta.