Fernando Martín Vicente presentó la dimisión de sus cargos como
presidente de la Federación Española de Discapacitados
Intelectuales (FEDDI) y vicepresidente del Comité Paralímpico
Español (CPE), antes de que se den por terminados los trabajos que
desarrolla el comité de investigación del CPE sobre las presuntas
irregularidades denunciadas sobre la selección de jugadores de
baloncesto para Sydney 2000. Dicho comité reitera, tras la dimisión
de Martín, que la investigación «seguirá su curso hasta la total
aclaración de los hechos».
El propio Martín Vicente ha reconocido que su dimisión es
consecuencia de «errores que han tenido su origen en disfunciones
administrativas y operativas, sin que en ellas hubiera
intencionalidad». El CPE informó de que Fernando Martín dimite de
sus cargos «ante las denuncias sobre presuntas irregularidades
observadas en la cualificación y selección de algunos deportistas
con discapacidad intelectual que participaron en Sydney en el
equipo de baloncesto».
Las citadas denuncias fueron efectuadas por el redactor de la
revista «Capital» Carlos Ribagorda, componente de la selección
española de baloncesto para discapacitados intelectuales que
consiguió la medalla de oro en los pasados Juegos de Sydney
2000.
El comité ejecutivo del CPE, por su parte, optó por mantener en
el cargo a Fernando Martín Vicente tras hacerse públicas las
denuncias de Ribagorda. Vicente aparecía como el principal
implicado en el reportaje de la mencionada revista. Martín, ante la
«gravedad que han tomado los acontecimientos», según él mismo
explica, dimitió con «carácter irrevocable» de sus cargos, después
de admitir que ha comprobado personalmente que existen «errores en
la valoración psicológica de alguno de los componentes de la
selección de baloncesto».
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