El Pamesa Valencia se desplazó ayer a Málaga, donde este viernes se
medirá al Unicaja, con la intención de sumar un triunfo que le
permita acabar el mes de diciembre como invicto y el año como líder
de la ACB, ante uno de sus rivales directos en la clasificación. La
principal novedad en el conjunto valencianos será la ausencia del
alero francés Hugues Occansey, quien esta semana ha firmado con el
club la rescisión de su contrato debido a unos problemas
cardiorrespiratorios que le impedían rendir al cien por cien.
Así, el entrenador, Luís Casimiro, tendrá que remodelar su cinco
tipo, que hasta ahora estaba formado por Rodilla, Maluenda,
Hopkins, Alston y el propio Occansey, al que muy probablemente
suplirá el capitán del equipo Víctor Luengo. El Pamesa intentará
culminar en Málaga un mes de diciembre pletórico, puesto que en los
siete partidos que ha disputado hasta la fecha, entre la liga ACB y
la Copa Saporta, no conoce la derrota, lo que le ha llevado a
liderar ambas competiciones.
El partido ante los malacitanos se prevé muy disputado, ya que
el Unicaja ha mostrado un juego muy equilibrado durante toda la
temporada y tratará de hacer valer el factor campo para acceder a
lo más alto de la clasificación, ya que se encuentra a tan sólo una
victoria de los valencianos.
Víctor Luengo, capitán del Pamesa Valencia, destacó que el
encuentro es uno de los más complicados que podían tener para
cerrar el año. Según el escolta valenciano, el Unicaja de Málaga es
un equipo en racha con un juego exterior de «gran nivel» y que se
vislumbra como uno de los rivales directos para la consecución de
los objetivos del Pamesa.
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