Albert Orfila
Cuando se cruzan equipos que marchan a distintas velocidades el juego suele sufrir un serio atentado. Los partidos no tardan en romperse y emergen los simulacros. El Germans Escalas fue testigo de ello. Hoy por hoy, una distancia sideral separa al TNT del Tabirako Bilbao, un esperpento de equipo que no parece tener sitio en esta categoría. De hecho, al grupo de Menal le bastó salir a todo trapo (26-11 en el primer cuarto) y mantener la concentración "y eso tiene mérito" durante unos pocos minutos para enganchar su segunda victoria y empezar a mirar hacia arriba.
De hecho, el partido (¿?) sólo sirvió para eso, para dar continuidad a la rehabilitación iniciada en Girona y reiterar que el TNT Jovent tiene en su plantel a una jugadora enorme: Silvia Lara. Al equipo de Menal no le hizo falta mucho más que un monólogo de la escolta para tumbar a su rival, que se hartó de robar balones y anotar. Lara tuvo en Boswell a una gran socia, aunque también debe calibrarse en su justa medida lo que había en frente.
Arreglado el partido en la primera parte (38-20), el TNT Jovent decidió que ya había hecho bastante y encaró de mala gana lo que restaba para el final. Xavi Menal movió todo el banquillo con el claro objetivo de alterar esta dinámica e inyectar más revoluciones, pero no hubo manera. Las mallorquinas nunca tuvieron problemas para administrar la renta que habían adquirido en el primer cuarto y que casi nunca bajó de los 16 puntos. Sólo en la recta final del duelo, el Jovent quiso ofrecer un poco más. Sus números crecieron y el marcador fiabilizó la diferencia que existe entre una y otra escuadra.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.