El discurso del Drac Inca sufrirá un exhaustivo chequeo. El Palau
abraza esta noche un partido distinto, fundamentalmente porque debe
arrojar conclusiones fiables. Llega el Ciudad de Huelva y el grupo
de Oliete somete su credibilidad a juicio popular. Después de León
y Ourense, el cuadro mallorquín tiene ante si una oportunidad
extraordinaria para reencontrarse con el éxito y fijar sus
credenciales entre los seis mejores equipos de la Liga. El nombre
de Kenny Green sigue generando algunos interrogantes, aunque todo
apunta a que el pívot se ha recuperado a tiempo de un esguince en
el tobillo izquierdo y participará en el duelo. Green quiere jugar
y se ha hartado de repetirlo.
La plantilla aguarda el partido entre la excitación y la
responsabilidad. De hecho, el cruce de caminos con el Huelva juega
un papel determinante en el tratado de intenciones que maneja
Oliete. El técnico estima fundamental superar al cuadro andaluz y
después equilibrar el número de victorias y derrotas ante el
Llobregat CC. El final de la primera vuelta y el inicio de la
segunda se antoja como el momento más propio para ello. Aunque con
el parón navideño de por medio, será la última vez que el cuadro
balear dispute dos encuentros consecutivos en su centro de
operaciones.
«Es un partido muy importante, los dos equipos estamos con el
mismo balance y creo que es un partido que puede marcar nuestra
trayectoria. Nos jugamos mucho y vamos a necesitar la ayuda del
público; siempre han estado de nuestro lado. Lo hizo cuando
estábamos con una victoria y cinco derrotas y su ayuda resultó
fundamental para levantarnos. Ahora estamos ante un reto importante
y estoy convencido de que van a estar ahí», significó Oliete al
término de la sesión de tiro que realizó durante la mañana de ayer
el equipo.
En el otro bando, todos los focos están pendientes de César
Alonso. El director de juego onubense arrastra problemas físicos y
eso es un problema importante para Andreu Casadevall. El juego de
Alonso ofreció muchas dudas durante el arranque de la competición,
pero con el paso del tiempo ha pasado a convertirse en una de las
principales referencias del equipo y en uno de los bases más
solventes de la Liga. César Alonso viajó ayer hacia Mallorca con el
resto de la expedición, aunque no ha podido entrenar a lo largo de
toda la semana y todo a punta a que será el canterano Alberto
González quien porte la brújula del Huelva.
Steve Horton, que se incorporó al equipo andaluz con la
temporada en curso y con la nacionalidad española bajo el brazo, se
enfrentará por cuarta vez a su ex equipo. Con anterioridad lo hizo
vistiendo las camisetas del Badajoz, Alicante y Cajasur de Córdoba.
En el banquillo del Huelva, otro viejo conocido de la afición
local, Pepe Silva.
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