Francisco Clavet jugó y perdió, quizás el último partido de su
carrera en el Abierto de Australia, pero Ana Isabel Medina logró a
la primera ocasión su clasificación para los octavos de final de un
Grand Slam. Clavet, de 33 años, el jugador más veterano del cuadro,
cayó ante el checo Jiri Novak (26 favorito), por 6-3, 6-4 y 6-1,
mientras que Medina, de 19, avanzó a la cuarta ronda al imponerse a
la francesa Nathalie Dechy, por 6-3 y 6-2.
Catorce años separan a uno y otro, y locuras del destino
coinciden en un año crucial para ambos. Mientras el bravo jugador
de Aranjuez piensa ya en la retirada (lo hará en el Masters Series
de Madrid) y no puede lograr los octavos de final en Melbourne en
su octava participación, Medina acierta a la primera y con un
poderoso tenis se hace un hueco entre las mejores. «Como jugadora
destaca por la mano y como persona por el genio que tiene», dice su
entrenador Gonzalo López, «y el genio bien llevado es bueno porque
algunos partidos los gana por su carácter».
Ayer, en una mañana de mucho viento y en la que se jugaba parte
de su futuro, Medina se convirtió en la quinta española que
alcanzaba los octavos en Melbourne (Conchita, Arantxa, María
Antonia Sánchez Lorenzo y Marta Marrero), un éxito que le hará
subir del puesto 49 al 42 y ganar 62.500 dólares australianos (unos
51.185 euros). «Y si sigue trabajando así tiene tenis para figurar
entre las 10 ó 15 primeras porque calidad le sobra», señaló el
técnico. Medina, campeona del Másters español y finalista
recientemente en el torneo de Hobart, se abrió paso ante Dechy en
100 minutos, y ahora espera anhelante el partido de su vida contra
Monica Seles.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Ultima Hora
De momento no hay comentarios.