Escocia intenta placar las opciones del quince español

El combinado británico ya se ejercitó, no sin polémica, al mediodía de ayer en el escenario de la confrontación. A ambos quinces sólo les vale el triunfo, caso contrario, la que caiga se verá casi condenada a quedarse fuera de las plazas de honor. El encuentro servirá para que los aficionados se reencuentren con su deporte tras poco más de dos años de ausencia de los escenarios mallorquines. Fue en el Camp Nou de Inca, en un España-Holanda masculino, cuando compareció esta disciplina por última vez.

Pero la de este mediodía también será una confrontación especial para Merche Batidor, capitana, y Rosa Calafat. Mallorquina y menorquina, ambas en las filas del Hospitalet, intentarán dar lo mejor de sí mismas ante su gente, más con las urgencias que arrastra España, que parece tener más ambiciones puestas en el próximo Mundial.

Además, la Federación Balear aprovechará este evento para promocionar la candidatura en vistas a acoger el Mundial de Rugby a 7 del 2005, un evento en el que se tienen puestas muchas esperanzas. Carlos Bravo cuenta con las bajas de las centros Eider Barrena y Paz Esteban, además de la pateadora Inex Etxeguíbel, y con el hándicap de recuperar terreno tras caer ante Francia en la primera jornada del Seis Naciones.