El presidente del Real Mallorca, Mateo Alemany, en una imagen de archivo. Foto: TOMÁS MONSERRAT.

TW
0
Tomeu Terrasa Los jugadores del Real Mallorca no han cobrado todavía ni las primas ni tampoco la ficha que cada uno de ellos tiene estipulada con el Real Mallorca. El club únicamente ha podido hacer frente a los sueldos de los jugadores pero no al resto de pagos que, habitualmente, en el caso de las ficha, se abona en tres plazos a lo largo de la temporada. Tampoco se ha hecho efectivo el contrato de imagen de los futbolistas y la situación llega a ser tan grave que un representante argumenta a sus representados que el club está en quiebra técnica.

El problema de tesorería es un hecho en la entidad de Son Moix y los jugadores, durante toda esta Liga, han asumido que no percibirán sus emolumentos como está acordado, aunque ninguno de ellos se ha quejado y todos han trabajado al máximo esperando que, en un corto periodo de tiempo, el club les informe al menos de cuándo pueden percibir el dinero que se les debe entregar.

Por otra parte, también hay que añadir a este problema que el Mallorca, al igual que la mayoría de clubes de Primera, está siendo investigado por la Agencia Tributaria, que le reclama una cantidad que ronda los 2.000 millones de pesetas. Debido a este tema, el club se ha visto en la obligación de frenar los pagos a los jugadores extranjeros, algunos de ellos en dólares, y a los que hasta la fecha no ha sido posible hacer frente. Tampoco las primas establecidas a principio de temporada se han entregado al plantel, aunque no será espectacular dada la clasificación del equipo, sí se deben entregar ciertas cantidades por puntos sumados y también por haber logrado varias victorias en la Liga de Campeones.

Los hombres de Kresic mantienen la calma y se limitan a trabajar al máximo para lograr asegurar cuanto antes la permanencia en la máxima categoría del fútbol español. Tarde o temprano el club cumplirá con los pagos, pero hasta ahora el presidente Mateo Alemany no ha podido abonar lo prometido, señal inequívoca de lo mal que está en estos momentos el Mallorca desde el punto de vista económico. El Grupo Zeta, por el momento, se ha desentendido totalmente del club y no ha invertido ni invertirá más dinero esperando que sea la propia entidad quien sobreviva de sus propios recursos.

No obstante, de seguir así la situación, no quedará más remedio que abrir la caja fuerte y cumplir con las fichas de todos y cada uno de los futbolistas. No es la primera vez que este tipo de circunstancias se dan en el Mallorca, pero en la época moderna no había llegado a ser tan grave y preocupante la situación como en estos precisos instantes. De hecho, si no se actúa con rapidez por parte de Alemany y de Asensio, los futbolistas terminarán el campeonato sin cobrar más que la nómina, que es una cantidad mínima en relación al dinero que perciben en concepto de fichas.