El descenso gana adeptos

La Liga se ha fracturado e incluso Osasuna se ha metido en problemas. La derrota del equipo de Lotina en Ciutat le ha alejado de la zona templada y le ha metido en la ristra de conjuntos que se mueven con el barro hasta las rodillas. Suma más puntos que el resto de sus adversarios, pero el sábado recibe al Deportivo en Pamplona y su futuro es más bien opaco. Ha iniciado un proceso de caída libre y sólo su solidez como local puede apartarle de la presión.

Las Palmas y Villarreal acabarían por encima del Mallorca si la competición se cerrara hoy, porque su golaverage particular es superior. Sin embargo, también andan metidos en apuros. El grupo de Fernando Vázquez tomó oxígeno a costa del Alavés, pero hasta entonces sólo había 1 punto de los 21 últimos. Los problemas económicos y la suspensión de la licencia de Nacho González han dinamitado la pobre estructura canaria y el domingo visita Balaídos. Mientras, el Villarreal fue sacudido en Chamartín y sigue huérfano tras la baja de Palermo. Su descenso ha sido vertiginoso y sólo un triunfo ante el Valladolid el domingo acicalaría su situación.

El Zaragoza ha sido el último en entrar en coma. Ni Luis Costa ha logrado cambiar la dinámica aragonesa y la derrota en Málaga les ha enviado a los suburbios de la Liga. Además, el conjunto maño "que ya tiene un punto menos que el Mallorca" recibe en La Romareda a un Betis lanzado. El Tenerife ha progresado con Clemente y ha asomado la cabeza cuando parecía muerto. Los canarios se han rehabilitado, han sumado 7 de los últimos 9 puntos y fueron capaces de tumbar a la Real en Anoeta. Con 31 puntos, superarían al Mallorca si le ganan el domingo.