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Efe - ROMA
La posibilidad de que el delantero brasileño Ronaldo sea fichado por el Real Madrid ha causado estupor en Italia, aunque su club, el Inter de Milán, niega que existan condiciones para hablar de esa operación. La prensa deportiva italiana se hace eco en grandes caracteres de las declaraciones formuladas ayer viernes por el director general del Real Madrid, Jorge Valdano, en el sentido de que Ronaldo desea dejar el Inter y, en ese caso, de optar a su eventual fichaje. A este respecto, la única reacción oficial del Inter aparece en su página de internet, a través de un comunicado según el cual «en relación con los comentarios procedentes de España y difundidos a través de los medios de comunicación sobre una iniciativa del Real Madrid respecto a Ronaldo hay que precisar que el origen está en un encuentro entre el representante del jugador y el club español».

El equipo italiano subraya sus «excelentes relaciones» con los madridistas, que han hecho posible «un contacto directo entre los dos clubes y la inmediata constatación de que no existen las condiciones mínimas para plantearse el asunto». Mientras tanto, el director técnico del Inter, Gabriele Oriali, ha atribuido el origen del caso a una estrategia del representante del jugador, Alexandre Martins, «capaz de hacer subir la tensión cuando se le presenta la oportunidad». La prensa afronta el asunto de distinta manera y, así «La Gazzetta dello sport», asegura que «Ronaldo quiere al Real Madrid» y trata con cortesía al club español, del que afirma que se ha comportado con corrección.

Por su parte, el «Corriere dello sport» titula «Ronaldo secuestrado por el Real» y recuerda que el proceso parece similar al del año pasado con Zinedine Zidane, que al final dejó el Juventus para fichar por los madridistas. La prensa en general apunta que las relaciones de Ronaldo con el entrenador del Inter, el argentino Héctor Cúper, no son buenas, lo que también podría condicionar el eventual deseo del delantero de abandonar a los italianos. Asimismo, se señala que el brasileño, junto a Àlvaro Recoba y a Cristian Vieri, acaba de tener el gesto de recortar su sueldo, como una manera de testimoniar su afecto por el club milanés, en especial porque le ha apoyado durante su larga y negra racha de lesiones, de la que sólo ha salido a finales de la pasada temporada.