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EFE-COPENHAGUE La segunda jornada del Mundial de Ciclismo en Pista no deparó para la delegación española buenas noticias. Miquel Alzamora no fue ajeno a esta jornada completamente aciaga. El mallorquín, que participaba en la última final del día, la de scratch, tampoco pudo cuajar una buena actuación al concluir la carrera en decimocuarta posición. El corredor de Artà partía como uno de los principales favoritos a la medalla en esta especialidad, pero nunca se encontró a gusto y su actuación resultó decepcionante.

El oro en esta nueva prueba mundialista fue para el suizo Marco Marvulli, mientras que la plata se la adjudicó el británico Tony Gibb. La polémica surgió con la medalla de bronce ya que el ucraniano Volodymyr Rybn, tercero en la línea de llegada, fue descalificado en beneficio del alemán Stefan Steinweg. En persecución Gemma Pascual y el equipo masculino quedaron eliminados en las calificaciones. Mientras, David Cabrero y Rubén Donet, en la final del kilómetro, quedaron en decimosexta y decimonovena posición.

Gemma Pascual se encargó de abrir la participación española en la segunda jornada en una prueba, que según reconocía la propia corredora, no era la suya. «La invitación nos llegó muy tarde y pero mis objetivos son la puntuación y el scratch». Despues de Gemma el turno fue de los equipo de persecución, que a punto estuvieron de clasificarse para la segunda ronda, pero la novena posición les dejó a las puertas de lo que hubiera sido un gran éxito, aunque Segi Escobar se mostraba muy satisfecho.