La diada organizada por las peñas del Real Mallorca continúa siendo
motivo de debate dentro y fuera de las paredes de Son Moix. El
asunto ha salpicado prácticamente a todo el entorno, incluido el
vestuario. Cierto sector de las peñas acusa a los futbolistas de
haberse olvidado del tema y la sola presencia de Miki Garro en la
jornada del pasado sábado ha creado un clima enrarecido entre este
núcleo de la afición y los futbolistas de la primera plantilla.
El capitán del equipo, Paco Soler, compareció ante los medios
para dejar clara cuál es la versión de los futbolistas al respecto.
«Entiendo que las peñas lo organizaron pensando que ese fin de
semana no hay Liga pero no caen en la cuenta de que los jugadores
también son personas, padres de familia, gente que está fuera de
sus casas y que un fin de semana como el pasado les apetece estar
con su familia. No es que no les guste estar con las peñas, pero
tienen derecho a la intimidad y a ser personas», manifestó el
capitán del Mallorca.
Lo que más a molestado en el vestuario ha sido escuchar ciertos
comentarios relacionados con la negativa de los futbolistas de ir a
los actos organizados por las peñas. «Queremos dejar claro
"refiriéndose a los jugadores" que no somos ni malas personas, ni
mala gente. Quien diga que no queremos estar con las Peñas,
miente», dijo el capitán.
Soler pidió disculpas si se hirió la sensibilidad de los
aficionados pero recordó también que en la gran mayoría de actos
organizados por las peñas hay representación de la primera
plantilla y añadió también que la forma de enterarse por parte de
los futbolistas de este acto no fue la más indicada. «Si realmente
les interesa nuestra presencia que se informe con antelación, un
mes antes, por ejemplo, para programarlo con tiempo. Posiblemente
si nos lo hubiesen pedido les habríamos dicho que mejor hacerlo en
otra fecha ya que esos días mucha gente se irá fuera de la Isla»,
declaró Soler.
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