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Angel María Villar afrontará la junta directiva más comprometida de su mandato al frente de la Federación Española de Fútbol (RFEF), marcada por el despido del secretario general, Gerardo González, y la acusación sobre el vicepresidente Juan Padrón de presuntas irregularidades. Las territoriales y todos los sectores del mundo del fútbol presentes en la directiva (11.00 horas) esperan hoy las explicaciones de Villar sobre lo acontecido en las dos últimas semanas, desencadenado por la destitución de Gerardo González, el 29 de enero, y culminado el martes con la dimisión en pleno de los miembros del Comité de Competición y las denuncias periodísticas sobre Padrón.

Villar, que lleva al frente de la RFEF desde julio de 1988, debe poner fin al silencio que ha marcado los últimos días en los que, además de zanjar con un escueto comunicado sin explicar los motivos, anunció el despido del secretario general, uno de sus hombres de confianza durante los últimos quince años.

Desde entonces el enfrentamiento, apenas exteriorizado pero generado hace tres años, entre Gerardo González y Juan Padrón, vicepresidente primero y responsable de asuntos económicos, dejó de ser un secreto. El hecho de que González no haya firmado todavía el finiquito, aunque los términos de la rescisión estaban contemplados en el contrato de alta dirección del secretario general, ha enturbiado más la situación, en la que algunas federaciones territoriales e incluso algunos clubes han planteado la necesidad de una auditoría de gestión.

El Consejo Superior de Deportes (CSD) hace una auditoría de carácter financiero, no de gestión, a todas las Federaciones, obligadas a justificar sobre un presupuesto las subvenciones que anualmente reciben de este organismo y los datos correspondientes a fútbol son correctos.

Las acusaciones sobre el presunto uso indebido que el vicepresidente Padrón pudo haber hecho de fondos federativos han llevado al también presidente de la Federación Tinerfeña a subrayar que en todas las cuentas de la RFEF existe «una total transparencia». Padrón se vio obligado a hablar el martes en Palma de Mallorca, horas antes del amistoso entre España y Alemania, para desmentir las acusaciones de que presuntamente cargó cuantiosos gastos a la RFEF para costear el viaje de familiares suyos al Mundial de Corea y Japón.