BASILEA: Zuberbühler (*), Haas (*), Murat Yakin (**), Zwyssig (**), Atouba (*), Barberis (*), Cantaluppi (*), Hakan Yakin (*), Chipperfield (*), Giménez (*)y Rossi (*).
Cambios: Varela (*) por Yakin, Duruz (*) por Chipperfield y Rossi (*) por Huggel.
DEPORTIVO: Juanmi (*), Héctor (*), Jorge Andrade (*), Naybet (*), Romero (*), Donato (*), Scaloni (*), Sergio (**), Duscher (**), Luque (*) y Makaay (*)
Cambios: Tristán (**) por Donato, Acuña (*)por Sergio y Amavisca (*) por Luque.
Àrbitro: René Temmink (Holanda). Amonestó a Luque.
Gol:
1-0, minuto 30, Hakan Yakin.
Efe|BASILEA
El Deportivo hipotecó su futuro europeo con una derrota ante la «cenicienta» del grupo D de la Liga de Campeones, en un partido en el que los papeles se invirtieron y el Basilea hizo desaparecer durante la primera parte al equipo coruñés del terreno de juego para defender en la segunda el gol de su estrella, Hakan Yaskin. El Deportivo comenzó el encuentro con más corazón que cabeza, sabedor de la importancia de la victoria en Basilea, pero la necesidad de sumar los tres puntos pesó sobre el conjunto de Irureta y se transformó en precipitación y repetidas pérdidas de balón.
El primer disparo a puerta de Luque antes de que se cumpliera el primer minuto de juego, es un claro ejemplo de las urgencias del conjunto coruñés. El Basilea se dedicó a esperar y recuperar balones, y poco a poco, fue ganando terreno y encerrando al Deportivo prácticamente en su área y eso propició que los suizos dispusieran de hasta tres oportunidades de gol durante los primeros veinte minutos. Unas veces la inocencia de los delanteros suizos, liderados por el omnipresente Hakan Yakin, y otras la fortuna, como en el lanzamiento al palo de una falta botada por Murat Yakin, evitaron que el Depor hipotecara de antemano el partido.
La reacción gallega llegó mediada la primera parte, y poco apoco fue creando ocasiones de gol y mejorando su juego. Makaay, solo en la punta coruñesa, gozo, tras pases de Luque y Scaloni en los minutos 25 y 28, de sendas oportunidades de gol, pero Zuberbühler logró despejar a córner. Tras el saque de esquina del segundo de los disparos del estilete holandés pudo llegar el primer tanto deportivista, pero el lanzamiento de Scaloni fue repelido por Haas bajo palos.
A los 30 minutos de juego Hakan Yakin hizo justicia a su fama de «jugador más peligroso del Basilea» y, tras recoger en la frontal del área un pase del argentino Gimenez, batió con duro disparo a Juanmi. La precipitación del Deportivo se convirtió en «pájara» y los de Irureta quedaron a merced del Basilea que creaba claras ocasiones de gol de la nada. Con un resultado en contra que le dejaba último de grupo con un punto en tres partidos, Irureta no tuvo más remedio que reforzar el ataque. Donato se quedó en la caseta y Tristán salió para hacer compañía a un solitario Makaay. Los coruñeses trataron de controlar el partido, moviendo más el balón en el centro del campo y buscando el juego por las bandas.
El Depor mejoró, pero no lo suficiente, y nuevamente el Basilea, en el minuto 55, rozó el gol con un disparo cruzado de Barberis que salió a escasos centímetros del palo derecho de Juanmi. La jugada polémica del partido llegó un minuto más tarde después de que Luque fuera derribado dentro del área pequeña del Basilea. Los gallegos reclamaron penalti, pero la única respuestas del colegiado holandés Temmink fue mostrar cartulina amarilla a Luque. Esta acción puso fin al partido y puede también poner fin a su participación en la Champions ya que se ha complicado mucho la vida.
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