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El «caso Borrás» ha quedado visto para sentencia. El Comité Balear de Disciplina Deportiva debe inhabilitar hoy al presidente de la Federación Balear de Fútbol (FTBF) y quedar al margen de un contencioso que también salpicará al grueso de su actual equipo directivo. Benestar Social, a través de la consellera Fernando Caro, ha rechazado la petición de recusación formalizada la semana anterior por los servicios jurídicos de la FTBF y esta noche debe finiquitarse el primer capítulo de un pleito que lleva visos de eternizarse.

Antonio Borrás del Barrio, que se enfrenta a un delito de usurpación de competencias denunciado por la Balear de fútbol sala, tiene asumido que tras la propuesta del juez instructor del caso -tres años de suspensión-, Disciplina Deportiva también resolverá en su contra, aunque públicamente sostiene que «las alegaciones que hemos presentado son rotundas». De hecho, la propia Joana Maria Petrus, que hace unos días cesó en el cargo de directora general d'Esports, y la consellera Fernando Caro, han deducido en público que «tras la propuesta del juez instructor todo a punta a que la inhabilitación es un hecho».

No obstante, la sentencia de este Comité no debe apartar a Borrás de la poltrona de la Balear. El directivo interpondrá un contencioso administrativo y en unos pocos días obtendrá la suspensión cautelar. Diversos juristas consultados por esta redacción coincidieron al señalar que la adopción de esta medida no sólo permitirá a Borrás del Barrio mantener su cargo en la FTBF, sino incluso ganar el caso. Borrás del Barrio sostuvo de nuevo que «si me inhabilitan se cometerá una gran injusticia. Desde hace tiempo tengo la impresión de que todo lo que está ocurriendo obedece a una animadversión personal de la ya ex directora general d'Esports. En todo este lío parece que se ha olvidado un aspecto fundamental: la Balear simplemente ha cumplido órdenes de Madrid, simplemente hemos actuado como simples intermediarios. La propia federación de fútbol sala ha querido exculparnos, pero están obsesionados en inhabilitarme, cuando lo que deberían hacer es impartir justicia».