Desde el principio se formó un numeroso grupo en cabeza de la
carrera en la más pequeña de las cilindradas y en ese grupo estaban
todos los favoritos, con tres españoles entre sus unidades, Daniel
Pedrosa, Pablo Nieto y Héctor Barberá, ambos con Aprilia.
Con el paso de las vueltas se hizo la selección definitiva y en
ella, el primero en caer, literalmente, fue el valenciano Barberá,
al que se llevó por delante el italiano Andrea Dovizioso en su
caída y, casi al final, le sucedió lo mismo a Pablo Nieto.
El piloto de Madrid, autor de la «pole position» de
entrenamientos, forzó el ritmo al máximo para intentar superar al
sanmarinense Alex de Angelis (Aprilia) y en su afán se coló y acabó
por los suelos.
Pudo regresar «Pablete» a la pista, pero lo hizo tan retrasado
que ni siquiera sumó puntos. Una vez más la fortuna le resultó
esquiva al hijo del campeón, Àngel Nieto, que en lugar de soñar ya
tiene pesadillas a la hora de pensar en su primer triunfo.
Mención destacada se mereció el piloto mallorquín Jorge Lorenzo,
quien desde muy atrás logró un sexto puesto que representa su mejor
clasificación en el Mundial y también la de su marca en esta
temporada. No así le sucedió a su compañero de escudería, el
campeón ilerdense de 1999, que se retiró con problemas
mecánicos.
«Fonsi» González Nieto luchó, por primera vez en la temporada,
por subirse a lo más alto del podio con su Movistar Aprilia, pero
un error que le indujo a pensar en que todavía quedaba una vuelta
más por disputarse, le hizo perder esa posibilidad frente al
francés Randy de Puniet, que sumó la primera victoria de su carrera
deportiva, mientras Toni Elías remontó tras una mala salida.
Mientras, «Fonsi» González Nieto, que vio como el sanmarinense
Manuel Poggiali (Aprilia), líder del Mundial se retiraba con el
motor de su moto roto, luchó con el francés Randy de Puniet por la
victoria, tenía claro que el sitio para adelantarlo en la última
vuelta era el estadio de Montmeló, pero se pensó que quedaba una
giro más y esperó su oportunidad.
El semblante le cambió bajo el casco cuando vio que en su paso
por meta ondeaba la bandera de cuadros, se le había escapado su
primera victoria de la temporada, pero cuando menos ha recuperado
casi toda su moral y ahora es segundo, igualado con Elías y De
Puniet, a siete puntos escasos de Poggiali.
Sete Gibernau (Movistar Honda RC 211 V) fue el tercero en subir
al podio, en su caso en la categoría reina de MotoGP, con el tercer
puesto después de pelear con el italiano Max Biaggi (Honda RC 211
V) por esa posición y ver como el transalpino cometía un error que
le relegaba a las últimas posiciones de la clasificación de la
prueba catalana.
Por delante de Gibernau sólo hubo dos nombres propios, los
italianos Loris Capirossi (Ducati Desmosedici), que le dio a su
marca la primera victoria en 44 años, y Valentino Rossi (Honda RC
211 V) que se la entregó en bandeja al cometer un garrafal
error.
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