Infravivienda junto a la carretera vieja de Inca a Alcúdia a su paso por la capital del Raiguer., | Pere Bota

TW
116

El Ajuntament d’Inca lleva meses negándolo pero fuentes policiales confirman a Ultima Hora que en la capital del Raiguer ya hay dos asentamientos con varias familias sin hogar viviendo al raso. El Consistorio tampoco ha informado al IMAS de la existencia de infraviviendas en su término municipal.

Oficialmente en Baleares solo se realizan recuentos de personas en situación de sinhogarismo en Palma y Playa de Palma. La Cruz Roja les presta atención en coordinación con el Institut Mallorquí d’Afers Socials (IMAS) que es el organismo competente a nivel insular. El último balance de datos (de 2022) contabilizaba 443 personas sin techo en la Isla.

Tradicionalmente las infraviviendas y chabolas han sido un fenómeno exclusivo de Palma, pero desde hace meses se pueden apreciar a simple vista dos asentamientos en la capital del Raiguer. El primero de ellos está situado junto a la antigua carretera de Inca a sa Pobla, a su paso por la ciudad, frente al restaurante de comida rápida Mcdonalds. El segundo se ubica en las proximidades del Hospital de Inca junto a la autopista que une Palma y sa Pobla.

El Ajuntament d’Inca niega que se trate de asentamientos y se refiere a ellos como familias que han okupado viviendas. Lo cierto es que esas ‘viviendas’ carecen de techo o carpintería exterior. Las personas sin hogar se han instalado en ellas y en sus alrededores utilizando tiendas, telas y cartones para protegerse de la intemperie.

Noticias relacionadas

Los ayuntamientos son los competentes en la atención social a famillias. Ofrecen asistencia a través de los servicios sociales comunitarios a las personas que lo requieren e informan al IMAS de los casos que precisan de albergue o de algún otro recurso que ellos no puedan prestar. El instituto dependiente del Consell asegura no tener constancia de ningún caso de sinhogarismo en Inca: «Ni asentamiento, ni personas que vivan en la calle, el ayuntamiento no nos ha comunicado nada», dicen fuentes del IMAS.

PB030125002209.jpg

El IMAS dispone de varios recursos habitacionales en la Part Forana destinados a menores con medidas de protección y personas mayores de edad en riesgo de exclusión o sin hogar. Hace tiempo que cuenta con un albergue específico en Manacor. El pasado mes de diciembre abrió además el centro de Cal’s Agustins en Binissalem. Aunque este último está más enfocado en la inserción sociolaboral, tiene 26 plazas residenciales. Está gestionado por el Obispado, igual que los talleres que formentan la inserción sociolaboral de personas sin hogar o en riesgo de exclusión en Binicanella. Aunque estén ubicados en la Part Forana dan servicio a toda Mallorca.

Tradicionalmente las personas se quedaban en la calle en el proceso de empezar de cero en un nuevo país, tras perder su trabajo o sufrir un desahucio. También por adicciones y problemas de salud mental. El perfil está cambiando en Baleares. La mayoría de personas sin hogar son actualmente de origen Europeo, un 40 % autóctonos de las Islas y buena parte de ellos tienen trabajo. La crisis de la vivienda les ha llevado a la situación actual de exclusión.

Infravivienda en las inmediaciones del Hospital d'Inca

Baleares es la comunidad en la que más aumenta el precio de la vivienda y los ciudadanos de las Islas tienen que dedicar un 30 % de su sueldo a tener un techo. Es el porcentaje más alto del País y no deja de crecer.

«El precio de la vivienda hace que el dinero no te de para alquilar una vivienda. De hecho a veces no da ni para alquilar una habitación. Encontramos personas que tienen trabajo o que cobran prestaciones económicas en situación de sinhogarismo», explica Marga Plaza, responsable del programa de atención a personas sin hogar de Cruz Roja.