TW
0

La banda izquierda recupera la lógica. Dos meses después de sufrir una rotura de fibras en el cuádriceps de su pierna zurda, el sevillano Hipólito Fernández Poli (Sevilla, 1977) volverá hoy a sonreír. Desde su lesión, que coincidió con el último partido en el banquillo del portugués Jaime Pacheco (2-0 en Albacete), el inquilino de su demarcación ha supuesto un quebradero de cabeza primero para Tomeu Llompart y después para Luis Aragonés. Toni González, David Cortés y Javier Olaizola han sido los elegidos para ocupar una demarcación que tiene en Poli al único jugador específico.

El jugador sevillano está ilusionado con su regreso: «Tengo muchas ganas porque se ha hecho demasiado largo. La recaída que sufrí en el calentamiento ante el Atlético ha retrasado bastante la recuperación y hemos ido sobre seguro». Al respecto de la lesión dijo que «pensé que tenía una pequeña contractura, pero después se confirmó la rotura. Yo jamás había tenido problemas musculares».

Poli elogió el trabajo realizado por los tres jugadores que han ocupado ese carril izquierdo y reconoce que lo ha pasado mal. «Desde fuera se pasa mucho peor, pero la mejoría del equipo es evidente. Estamos con otra intensidad y vamos por el buen camino. El Mallorca merece estar más arriba en la clasificación».