La segunda edición de la Copa Coca Cola aterriza en Palma de
Mallorca con un billete para la Copa Intercontinental en juego.
Treinta y dos equipos y más de quinientos niños de entre 13 y 15
años estarán presentes entre el sábado y el domingo en el
polideportivo de Sant Ferran, con la meta de alcanzar una plaza
para la fase final que se celebrará en Sevilla y, más tarde, el
pasaporte para Portugal.
Los equipos están formados por un mínimo de catorce jugadores y un
máximo de dieciocho. Las normas son las vigentes de la Real
Federación Española de Fútbol (RFEF). Todos los participantes
recibirán una equipación como obsequio, habiendo trofeos reservados
para los tres primeros equipos y para el mejor jugador y portero de
la competición.
El Sant Francesc intentará defender la corona alcanzada el
pasado año en una competición que cuenta con el apoyo del Institut
de Serveis Socials i Esportius de Mallorca, la Federació Balear de
Fútbol y al Ajuntament de Palma, además de Coca Cola, firma que
asume el patrocinio de un evento que busca promocionar el fútbol
base en una edad trascendental.
La Copa Coca Cola, que en su primera entrega resultó un éxito
rotundo, se divide en una primera fase escolar, que da paso a una
segunda porción de la competición previa a la pugna final entre los
23 mejores equipos del país.
En el acto de presentación de la competición, que dará inicio el
sábado a las 10 de la mañana, estuvieron presentes Xisco Ramis,
responsable del área deportiva del Institut de Serveis Socials i
Esportius de Mallorca; Javier Morente, que acudió en nombre del
Ajuntament de Palma; Miquel Bestard, presidente de la gestora que
rige la Federación Balear de Fútbol y Biel Mulet, en nombre de Coca
Cola. Todos desearon toda la suerte del mundo a los equipos
participantes y lanzaron una apuesta decidida por un evento que
potencia el fútbol en sus categorías inferiores.
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