Las dificultades de algunos de los pesos pesados de la ACB en la
jornada del fin de semana, la última antes de la Copa del Rey, que
el próximo jueves dará el banderazo de salida en Sevilla, han
sembrado de incertidumbre la carrera por el primer título de la
temporada. Cinco de los ocho finalistas coperos -Tau Vitoria,
Barcelona, Estudiantes, Real Madrid y Pamesa Valencia- saldaron sus
respectivos compromisos con resultados positivos. Los otros tres
-DKV Joventut, Caja San Fernando y Ricoh Manresa- cosecharon
marcadores adversos, pero eso no importa.
El Tau derrotó al Unicaja por un apretado 73-70 en un partido
que perdía por siete puntos a cinco minutos del final. El Barcelona
pasó por muchas complicaciones para deshacerse del colista, el
Etosa Alicante, cuyas opciones murieron después de una canasta de
Bodiroga que los árbitros dieron por valida al considerar que De
Miguel se había colgado del aro. El 66-60 final ilustra el estado
del Barça, brillante en Europa y dubitativo en la Liga. Los dos
candidatos coperos de Madrid, el Real y el Estudiantes, cumplieron
con lo previsto. Los madridistas pasaron por encima del Murcia a
domicilio (84-103), ya suman cuatro triunfos consecutivos y han
confirmado que la cita de Sevilla les llega en buen momento.
El Estudiantes venció al Unelco en Tenerife (72-84) antes de que
la directiva canaria suspendiera de empleo y sueldo al técnico Paco
García después de evitar la huelga de sus jugadores con el pago del
dinero que adeuda a la plantilla. Además, el Pamesa llenó el
deposito de moral al remontar diecinueve puntos de desventaja y
sobrepasar por 86-76 al DKV Joventut en una gran tarde de Dikudis y
Rigaudeau. Por último, tanto el Ricoh Manresa, que cayó en pista
del Breogán el día de los doscientos partidos ACB de Davin Davis
(82-77), ha perdido cuatro de sus últimos cinco encuentros y
retrocede. Lo mismo le sucede al Caja San Fernando, presa fácil del
Casademont (82-77).
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