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Recaló en la isla en el verano de 1998, con 21 años recién cumplidos, gracias a la buena relación entre el entonces propietario del Real Mallorca, Antonio Asensio, y el presidente del Mérida, José Fouto. Llegó como un desconocido, después de una temporada en blanco en el conjunto extremeño, con un palmarés casi sin estrenar a nivel de clubes -apenas un par de partidos con Independiente- y con la designación como mejor portero del Mundial Sub'20 de Malasia'97 como principal aval. Con Roa como dueño absoluto de la meta isleña, su primer destino fue el vestuario nodriza. Un lustro después de su silenciosa llegada, la vida le ha cambiado por completo. Ya es el portero que en más ocasiones ha defendido la meta del Real Mallorca en Primera División y, si juega el domingo ante el Villarreal, derribará el registro de 143 partidos de Liga fijado por su compatriota Ariel Ibagaza desde el pasado verano, convirtiéndose en el extranjero con más encuentros disputados en la historia del club balear en la máxima categoría. Leo Franco (San Nicolás, Argentina, 1977) está rompiendo registros en su temporada más discreta, una contradicción que no le impide acceder a la galería de los elegidos.

Leo Franco ha conseguido situarse en el ático de una lista que inauguró en la temporada 1950-51 el húngaro Mogoi, al que se puede considerar el primer extranjero profesional de la historia del club, a pesar de los fichajes en la época del Alfonso XIII del checo Zaubek y del británico Greenwell. Desde entonces, más de un centenar de futbolistas no nacidos en España han defendido la camiseta rojilla. Unos han dejado huella por sus goles, sus paradas o por su carisma; otros, en cambio, abandonaron la isla por la puerta trasera, sin hacer ruido y con la frustración acuñada en su hoja de servicios. A sus 26 años -el 20 de mayo cumplirá 27- Leo Franco vive su quinta temporada en la primera plantilla del Real Mallorca. En su primera campaña, con 22 años, aprovechó al máximo la sanción deMono Burgos y le arrebató la titularidad. Tras compartir caseta con César Gálvez, Germán Burgos, Carlos Roa y el mallorquín Miki Garro, en cada una de esas temporadas fue el portero que más encuentros disputó: 30, 27, 22 y 36, respectivamente. Y en la actual, totaliza 28 encuentros en las 32 jornadas disputadas en lo que llevamos de campeonato. Hasta el momento suma 143 partidos en Primera con 196 goles encajados.

Formado en la cantera de Independiente, con el que debutó en la Primera División argentina con apenas 18 años, Leo Franco fue citado por Pekerman para el Mundial sub'20 de Malasia'97, en el que fue elegido mejor portero del torneo. En aquel Mundial coincidió con una selección de lujo, en la que figuraban, entre otros, Walter Samuel, Esteban Cambiasso, Diego Placente, Lionel Scaloni, Juan Roman Riquelme, Pablo Aimar o el ex mallorquinista Juan José Serrizuela. Su fichaje por el Mérida en el verano de 1997 frenó su ascensión -Mono Montoya le cerró las puertas y no jugó ni un minuto- y al año siguiente fichó por el Mallorca para reforzar la meta del filial, que esa campaña 98-99 militaba en Segunda División. Leo compartió demarcación con Valbuena -actual suplente de Láinez en el Zaragoza- y vestuario con futbolistas entonces desconocidos y hoy estrellas consagradas como Albert Luque o Diego Tristán, sin olvidar a Sastre, Rondo, Alvaro Novo, Pep Lluís Martí, Buades y Jesús Perera, entre otros.