TW
0

Efe|MONTEVIDEO
El delantero internacional uruguayo Fernando Correa, que esta temporada ha jugado en el Mallorca en calidad de cedido, fue sancionado con un año de suspensión por la FIFA, después de dar positivo en un control antidopaje tras un partido de la selección de Uruguay en las eliminatorias de la Copa del Mundo, según informaron en el día de ayer fuentes de la Asociación Uruguaya (AUF). La FIFA comunicó el pasado miércoles, la sanción al presidente de la AUF y vicepresidente de la Confederación Sudamericana (CSF), Eugenio Figueredo, confirmaron ayer a EFE fuentes de la Asociación Uruguaya. La Asociación Uruguaya, a su vez, ha comunicado la resolución de la FIFA a la Real Federación Española y al Mallorca, club en el que ha jugado a préstamo este año, agregaron los informantes.

La suspensión, que abarca tanto los partidos de selección como de clubes -el futbolista regresará al Atlético de Madrid-, será de un año y hasta el 31 de marzo de 2005. «Petete» Correa dio positivo de metabolitos de cocaína en el análisis al que fue sometido el 31 de marzo pasado, después del partido que Uruguay perdió por 0-3 frente a Venezuela en Montevideo, en la quinta jornada de las eliminatorias sudamericanas de la Copa del Mundo de Alemania 2006. El delantero jugó frente a Venezuela su primer partido oficial con la camiseta de Uruguay, y saltó al campo a los 60 minutos. Correa, de 30 años, había sido suspendido cautelarmente el 5 de mayo, al conocerse el resultado positivo.

El futbolista lleva casi una década en el fútbol español al que llegó en 1995 fichado por el Atlético de Madrid. Posteriormente jugó como cedido en el Racing de Santander (1996-1998), y luego regresó al Atlético de Madrid (1998-2002), equipo en el que fue campeón de la Segunda División española (2001-2002). En la temporada 2003-2004 Correa fue cedido al Real Mallorca, equipo en el que ha marcado 8 goles en la pasada Liga española. El presidente del Mallorca, Mateu Alemany, dijo al conocer la resolución de la FIFA que era un castigo «exagerado». El dirigente mallorquinista fue muy escueto al opinar sobre la sanción al delantero uruguayo, y se limitó a afirmar en la rueda de prensa que ofreció ayer en el estadio Son Moix tras el consejo de administración del club que «es jugador del Atlético de Madrid», por lo que deberá ser el club colchonero el que decida sobre el futuro del atacante sudamericano.