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César Toldrá|LISBOA
Holanda volvió a tener como freno en sus aspiraciones de alcanzar un título, las semifinales de un gran torneo después de perder en esta ronda en la actual edición de la Eurocopa de Portugal ante el equipo anfitrión. De hecho, el equipo naranja tan sólo cuenta en sus vitrinas con una Eurocopa, la conseguida en 1988 al vencer en la final del torneo a Rusia por 2-0. Las otras dos finales que figuran en su historial son la de los Mundiales del 74 y 78, en los que Alemania les privó del título en el primero y Argentina hizo lo propio en el segundo.

Pero es en la historia reciente, cuando el desencuentro entre Holanda y las semifinales ha sido más doloroso, debido en buena parte a su nula fortuna en los penaltis, ya que tanto en 1992 como en 2000 en la competición continental, así como en el Mundial'98, quedó fuera de la final al perder en la tanda final tras empatar en los 120 minutos de juego.

Además, la eliminación en la presente edición está acompañada con una retirada de importantes jugadores de la selección, que obligará a una regeneración del combinado ante la cercanía del Mundial de 2006. El guardameta Edwin van der Sar, los defensas Frank de Boer y Jaap Stam, el extremo Marc Overmars, y el centrocampista Paul Bosvelt han hecho pública su intención de dejar la selección, mientras que Van Hooidjdonk tampoco tendrá muchas opciones de afrontar ya la cita mundialista.

Pero Holanda está harta de quedarse a las puertas de la final de un gran torneo, puesto que al margen de 1988, en el resto de las ocasiones su presencia en las semifinales se cuentan por eliminaciones. Así sucedió en las Eurocopas de 1976, 1992, 2000 y 2004 y en el Mundial de 1998, ediciones en las que Holanda estuvo presente en la antesala de la final, pero fue incapaz de llegar hasta el último partido. Los penaltis han sido la cruz para los holandeses.

La maldición de los penaltis no respetó a Holanda ni siquiera en su casa, puesto que en el torneo celebrado a la par en su país y en Bélgica en 2000, Italia accedió a la final en detrimento de los organizadores tras recurrirse a estos lanzamientos. También los penaltis ajusticiaron a los holandeses en Inglaterra'96, pero en este caso fue en los cuartos de final ante Francia. Ante Portugal, las semifinales volvieron a ser la última estación de la trayectoria de Holanda en la Eurocopa.