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Paul y Martin Laciga, dos hermanos suizos que han marcado una época en el Swatch-FIVB World Tour, subieron a lo más alto del podio instalado en la pista central de Santa Ponça. La jornada final del Mallorca Open 2004 resultó un paseo para los Laciga, que en una hora y seis minutos de juego resolvieron las semifinales y la gran final. Los que más problemas les generaron fueron los brasileños Magalhães y Emilio, que no pudieron hacer pleno tras el triunfo el pasado sábado de Silva y França en féminas. En semifinales plantaron cara, pero un doble 21-16 en contra les apartó de la posibilidad de alzarse con el título. Fueron treinta y tres minutos de claro dominio helvético, en los que la tercera pareja del cuadro no se apiadó de sus rivales de turno y buscó por la vía rápida el pasaporte hacia la gran final.

Sus compañeros en el encuentro más esperado de Mallorca Open 2004 fueron los también suizos Heyer y Egger, que obtuvieron una trabajada victoria ante la pareja argentina Baracetti-Conde. Los centroeuropeos necesitaron tres sets para colarse en la final, y tuvieron que remontar el 21-16 en contra de la primera manga para respirar tranquilos. La contundencia del segundo set (15-21) devolvió el equilibrio a la contienda, para abrir las puertas a una tercera manga en la que todo valía. Finalmente, la fortuna cayó del lado de los suizos, que se deshicieron de Baracetti y Conde por 12-15 y sellaban así su penúltimo objetivo.

La tercera plaza fue para los brasileños Magalhães y Emilio, pero la atención la concentraba la final masculina, que resultó ser un paseo triunfo para Paul y Martin Laciga, que aprovecharon en buena medida el cansancio de sus compatriotas para vencerles por un doble 21-16, un marcador que deja claro el dominio de los que a la postre entraron a formar parte del libro de honor del Mallorca Open 2004, la última prueba que daba acceso al cuadro final de los próximos Juegos Olímpicos de Atenas, y el reencuentro del voley playa de élite con nuestra Isla.