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Fernando Fernández|ATENAS
El mejor momento del baloncesto español en las dos últimas décadas ha disparado las expectativas. Las dos selecciones se han metido en los Juegos por méritos propios y granjeándose el resto de todo el planeta, y en ellas, dos mallorquines definidos por su enorme talento son dos piezas elementales.
Marta y Rudy Fernández se han convertido en protagonistas de los Juegos. Están llamados a ser elementales en los esquemas de Vicente Rodríguez y Mario Pesquera, y buena parte de su futuro puede quedar diluciado tras la cita olímpica.
Marta ha aparcado varias ofertas de la WNBA para hacer realidad su sueño

olímpico y tras Atenas puede reflexionar seriamente sobre sus posibilidades lejos de nuestras fronteras. El Barça es su nuevo hogar y las medallas una ilusión que pasa inevitablemente por el encuentro que esta noche (21:15, hora española, Helliniko) juega la selección española femenina ante la temida República Checa.
El primer encuentro de cualquier torneo está plagado de trampas. Las centroeuropeas no serán un enemigo asequible. El primer paso siempre es delicado, más cuando aguardan Rusia, Grecia o Australia. Las cuentas pendientes del Europeo de Patras aún estar por saldar. Nigeria, Japón y Brasil -otro equipo a tener en cuentacompletan el cartel de una primera fase determi-
nante,
pues de ella saldrá el cruce de cuartos de final que defina el devenir de España.

Evitar a Estados Unidos es la consigna de Vicente Rodríguez.
Marta llega en un estado de forma ideal. La baja por lesión de Amaya Valdemoro dejaba a España sin una clara líder sobre el parqué. Y de la misma manera que se echó el equipo a las espaldas durante la final de consolación del pasado Campeonato de Europa -el partido que dio el pase a los Juegos-, en la recta final de la preparación olímpica ha hecho valer el talento y el poderío físico que definen a la mayor de una saga que se consagra en la capital griega.

Expectación
Si las chicas han generado una enorme expectación, el caso de la selección masculina no es una excepción.