REAL MALLORCA: Castell (*), Cendrós (**), Noceras (*), Crespí (**), Guasp (*), Alomar (**), César (*), Ernesto (**), Carlos (*), Toni Oliver (**) y Nacho (*).
Cambios: Emilio (**) por Ernesto; Marc (**)por Carlos; Jaime (*) por César y Castillo (*) por Toni Oliver.
REAL MADRID: Adan (*), Torres (*), Castañera (*), Pastor (**), Tébar (**), Parra (**), Ferran (*), Nieto (**), Valencia (-), Vázquez (*) y Chico (*).
Cambios: Arocha (*) por Chico; Mario (*)por Tébar y Novillo (*) por Vázquez.
Àrbitro: Nadal Riera (*). Regular actuación. Amonestó a los locales Cendrós, Ernesto y Nacho y a los visitantes Torres y Parra.
Goles:
1-0, minuto 48, Cendrós.
1-1, minuto 58, Nieto.
Carlos Román
El Mallorca de Paco Navarrete se sumergió en el nuevo curso con un elaborado empate frente a uno de los equipos con mejor cartel de la categoría. El Real Madrid, que en la temporada anterior claudicó en las dos ocasiones en las que se enfrentó a los baleares, pudo arañar en esta ocasión un empate gracias a su efectividad ante la portería contraria, pero en ningún caso justificó la superioridad que se le presuponía (1-1).
El partido acusó la falta de rodaje de la primera jornada y en la primera mitad resultaba casi imposible disfrutar de dos acciones consecutivas por parte de uno u otro equipo. Aún así el Mallorca había empezado avisando con un disparo envenenado de Ernesto desde la frontal (minuto 2) y el Madrid imponía su orden defensivo gracias a la contundencia de sus centrales e intentaba dar salida a su juego por medio de Tébar, uno de sus hombres más cualificados en el círculo central.
Las oportunidades de gol se hicieron esperar más de la cuenta y el conjunto balear no volvió a poner en aprietos a Adan hasta llegar al borde del descanso. En esa ocasión fue a través de un remate alto de Carlos tras una buena jugada de Alomar por el flanco izquierdo del ataque.
Tras el descanso el partido dio vuelco importante porque el Mallorca quería más y encontró petróleo en un acercamiento perfectamente trazado desde la línea de medios. Oliver asistió de manera magnífica al lateral Cendrós y éste definió con frialdad ante la meta blanca. Quedaba todavían muchos minutos por delante, pero el Madrid encajaba que severo golpe que le obligaba a replantearse por completo el encuentro (minuto 48).
Cuando todo parecía encarilado los isleños pagaron muy caro un despiste defensivo que a la postre resultaría definitivo. Una falta botada en las inmediaciones del área derivó en una serie de rebotes favorables a los madrileños y Nieto, que ya había hecho gala de su clase en el primer tiempo, perforó la puerta custodiada por Castell.
Después de lograr el empate, el conjunto blanco que dirige David Gordo apenas generó peligro sobre el marco de Castell, mientras que los rojillos se fueron con descaro en busca de los tres puntos. La entrada de Marc y sobre todo la de la Emilio, dieron otro aire al cuadro local, pero los mallorquinistas ya no tuvieron fortuna ante la puerta contraria y el empate fue inamovible.
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