Amador Pons15/09/04 0:00
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Apenas llevaba unos minutos en la Isla y el rostro de Elena Gómez ya dibujaba una sonrisa infinita. Por primera vez en cinco años su billete no tenía programada la vuelta a Madrid y su cara reflejaba felicidad. La gimnasta mallorquina ha alcanzado un acuerdo con Jesús Carballo para poder realizar la pretemporada en Manacor, para olvidarse de la presión de las dos últimas temporada y para recuperar la ilusión junto a su familia. Ayer, Elena ya estaba en casa. Elena Gómez siempre planifica a corto plazo y en estos momentos su futuro tiene techo dentro de tres meses. «Tengo tres meses para estar aquí. Han sido cinco años en Madrid soportando mucha presión, participando en muchas competiciones. He estado lejos de mi familia y ahora los necesito cerca. Van a ser tres meses para descansar psicológicamente, para disfrutar de estar con los amigos, para hacer cosas que no he podido hacer estos años» explica la deportista balear.

El equipo español de gimnasia artística femenina afronta en los próximos meses un proceso de preparación en el que van a primar las tareas físicas sobre el trabajo en los aparatos porque el primer gran objetivo, el Campeonato del Mundo de Melbourne, no va a llegar hasta noviembre de 2005. «En este periodo puedo entrenar perfectamente en Manacor porque es un trabajo muy mecánico. Básicamente se trata de mantener la forma física. Queda mucho tiempo para que llegue noviembre del año que viene y todavía no sé si voy a realizar algún cambio en mis ejercicios».

La Federación Internacional de gimnasia ha modificado el código de puntuación. A priori estos cambios pueden beneficiar al estilo de Elena Gómez, aunque la gimnasta mallorquina pide un tiempo para estudiarlo a fondo. «Es cierto que han cambiado el código. Hoy -por ayer- nos lo ha explicado Jesús Carballo, pero hay que estudiarlo bien y después ya determinaremos si me beneficia y si tenemos que hacer cambios» aseguró la gimnasta. En estos tres meses de estancia en la Isla, Joana Maria Rigo, la entrenadora que la descubrió, va a volver a jugar un papel muy importante. Será la encargada de dirigir los entrenamientos y tratará que Elena recupere la ilusión. «Ha sido mi primera entrenadora, y ahora se ha convertido en una amiga» finalizó la líder del equipo español.