Además de los movimientos que está generando el mercado, el
Mallorca tendrá que hacer frente el próximo domingo a un rosario de
dudas que pueden dejar despoblado su habitual once inicial.
Confirmadas definitivamente las bajas de Poli -sancionado- y
Fernando Niño -lesionado-, el equipo de Cúper podría perder además
a Miquel Àngel Moyà y a Jesús Perera, ambos aquejados por un cuadro
gripal que podría dejarles fuera de combate. El técnico ya ha
empezado a estudiar las alternativas para cubrir esas bajas y hoy
las pondrá en práctica en el tradicionapartidillo que prepara los
jueves.
De todas las ausencias, la más conflictiva para el entrenador
será la de Poli, ya que en el vestuario balear no existe ningún
recambio natural para el puesto de lateral izquierdo. Ante eso,
todo hace indicar que será finalmente Tuni el encargado de taponar
esa banda retrasando de nuevo su posición. El jugador solleric se
ha convertido en una solución de emergencia para el carril zurdo y
aunque no se encuentra demasiado cómodo en esa demarcación los
técnicos confían en él para jugar de inicio y cada vez tiene más
asumido su nuevo rol.
La baja de Fernando Niño, que sufre una tendinitis en su tobillo
derecho, será probablemente cubierta con la entrada de Ballesteros,
aunque no está descartado que Cúper eche mano de alguna nueva
fórmula. El suizo Müller, en el ojo del huracán desde que se
abriera el mercado invernal, también podría disponer de una ocasión
en última instancia.
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