Cubierto el primer mes de temporada, Rafael Nadal y Carlos Moyà
vuelven a pisar la tierra. Los tenistas mallorquines viajan el
próximo viernes a Argentina, donde comenzará la gira sudamericana
(jugarán en Buenos Aires, Brasil y Acapulco) antes de que se
dispute la primera eliminatoria de la Copa Davis y que lleguen los
dos primeros Masters Series del curso: Indian Wells y Miami.
Rafael Nadal y Carlos Moyà viajan con los papeles invertidos
respecto a lo que ha sido habitual en los dos últimos años.
Emanacorí ha superado por primera vez en su carrera deportiva al
palmesano en la Carrera de Campeones (la clasificación que
únicamente valora los resultados obtenidos en la presente
temporada). Nadal ocupa el puesto catorce con 43 puntos, mientras
que Moyà es el número 18 con 37 puntos. En la Lista de Entradas (la
clasificación que se utiliza para designar los cabezas de serie y
que mide los resultados de todo un año natural), Carlos es el
sexto, y Rafael ha ascendido hasta el puesto número 47.
En un principio la gira sudamericana no entraba en los planes de
Rafael Nadal. Emanacorí prefería quedarse en Europa jugando torneos
de pista cubierta, aunque la lesión que se produjo el año pasado en
el tobillo le ha obligado a tomar esta decisión. Nadal necesita
sumar puntos para asegurarse su presencia en los cuadros finales de
los Masters Series de Montecarlo, Roma y Hamburgo y jugando en
indoor es más complicado asegurarse los puntos que tiene que
defender en este tramo.
Nadal está entrenando a un gran nivel durante esta semana y si
los sorteos le respetan puede dar más de una sorpresa en
sudamérica. Rafael va a jugar tres torneos: Buenos Aires, Brasil y
Acapulco. En ellos va a encontrarse con buena parte de la Armada
Española y con los jugadores argentinos mejor situados en el el
ránking. Con Moyà coincidirá en Buenos Aires y Acapulco, ya que en
la semana de Brasil ha preferido descansar y tan solo jugará un
torneo de exhibición.
Igual que para Rafael Nadal, es un buen momento para que Carlos
Moyà coseche buenos resultados. El año pasado fue finalista en
Buenos Aires (perdió la final ante Guillermo Coria) y ganó en
Acapulco (venció en la final a Fernando Verdasco). Para el
palmesano los buenos resultados cosechados la temporada pasada son
la mejor garantía de que puede repetir buenos resultados, aunque
también le obligan a estar en las rondas finales si no quiere
descender posiciones en la Lista de Entradas.
Una de las cosas que advierte de las intenciones de Moyà es el
hecho de no jugar en Brasil. Carlos quiere estar en las finales de
Argentina y Acapulco y los viajes no le permiten jugar en las
mejores condiciones las primeras rondas. También hay que pensar en
Indian Wells y Miami.
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