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Con las dudas de Correa y Romeo y el probable regreso de Pereyra y Ramis al once y de Westerveld a la convocatoria, el Mallorca partirá hoy rumbo a la épica. El grupo balear se dirige esta tarde a Barcelona para medirse mañana (20.00 horas Camp Nou) al líder, un conjunto que ha arrancado 2005 sin la chispa ni el fútbol de salón con el que roció el torneo en la primera parte del curso y que ya nota la presión del Real Madrid, a sólo cuatro puntos. El ambiente en Can Barça está tan enrarecido que hasta el mismísimo Johan Cruyff, una voz autorizada para el barcelonismo, ha puesto en tela de juicio que el equipo azulgrana pueda ganar la Liga si continúa ofreciendo el nivel de fútbol que exhibe en las últimas jornadas. Ganar en el Camp Nou, donde sólo el Valencia (1-1) y el Atlético (0-2) rascaron puntos, se presume una empresa de demasiada enjundia para un equipo que sigue en descenso pese a su mejoría -ha sumado 7 de los últimos 9 puntos- y que acude consciente de que su destino se divisa más allá de la Ciudad Condal. Levante, Villarreal, Real Sociedad y Racing de Santander marcarán el futuro en las próximas fechas.

Las vísperas arrojaron una mala noticia. El delantero uruguayo Fernando Correa es seria duda para el encuentro de mañana por una sobrecarga muscular en el muslo derecho. Petete, que reapareció el pasado domingo ante el Albacete tras cumplir una sanción de nueve meses tras su positivo por cocaína, ha acusado el esfuerzo después de su larga inactividad y podría quedarse en tierra. Los servicios médicos del club esperarán la evolución de su lesión para tomar una decisión al respecto de su inclusión en la convocatoria, que facilitará hoy el entrenador del Mallorca, Héctor Raúl Cúper, al término de la sesión preparatoria. Otro de los focos de preocupación apunta al estado físico de Bernardo Romeo. El delantero argentino sufre una distensión del ligamento colateral interno de la rodilla derecha que ya le impidió estar a disposición de Cúper para el encuentro disputado el pasado domingo. En el entrenamiento de ayer, Berni estuvo realizando ejercicios individuales en el campo y hoy se despejará la incógnita. En cualquier caso, el papel del futbolista cedido por el Hamburgo ha pasado a un segundo plano. Después de ser titular en las dos primeras jornadas, frente a Betis y Real Madrid, fue suplente ante Getafe y Málaga, disputando los últimos minutos del encuentro.

En las últimas semanas, Héctor Cúper ha apostado por blindar algunos de sus ensayos. En la sesión a puerta cerrada del pasado miércoles, el técnico argentino no dibujó ningún once titular sobre su libreta y optó por un nueve contra nueve. En la sesión preparatoria de ayer, realizada bajo un frío polar y una lluvia incesante, el de Chabas tampoco mostró sus cartas y apostó por una mezcla de fútbol y rugby. Pese asecretismo, dos nombres han cobrado protagonismo en las últimas fechas. No es que el técnico vaya a apostar por atrincherar hombres en la retaguardia, aunque no sea Cúper un entrenador de discursos osados, pero sí que arropará a Miquel Angel Moyà. Una opción que maneja el técnico es repetir el experimento de Málaga. En aquella cita, Ivan Ramis se situó como falso lateral derecho, con Sergio Ballesteros y Mark Iuliano en el corazón de la zaga y Poli en la banda izquierda. Con la pareja Ballesteros-Iuliano, que han formado de inicio en los dos últimos partidos, el Mallorca ha taponado las vías de agua en la defensa y eso lo ha agradecido el equipo. Las pruebas son evidentes. Con ambos sobre el terreno de juego, ante Real Madrid, Málaga y Albacete, el grupo balear no conoce la derrota. Frente al equipo madridista, cuando Iuliano fue expulsado, el marcador señalaba 1-1.