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C.R.
El Grupo Giménez Alaró, equipo de voleibol que milita en la Primera división nacional femenina, ha empezado a preparar las maletas para trasladarse a Calvià en un futuro no muy lejano. El club mallorquín, que es uno de los más firmes candidatos a conseguir el ascenso a Liga FEV a finales de temporada, está estudiando establecer su centro de operaciones en el municipio calvianer, ya que allí aumentarían sus posibilidades para edificar un ambicioso proyecto que pretende culminar a corto plazo con el ascenso a la Superliga femenina.

Ambos añadieron ayer, durante la presentación de la prueba, que el motivo que impide la disputa de los encuentros de la fase final en el mismo lugar en el que equipo juega la liga, es que la Federación Española de Voleibol exige dos pabellones para disputar con normalidad los partidos y en estos momentos Alaró sólo cuenta con uno.

Por otra parte, destacar que el Grupo Jiménez será el anfitrión de la fase final de ascenso a la Liga FEV, que se disputará entre el 21 y 24 de abril en Calviá y en la que tomarán parte los ocho mejores equipos de los distintos grupos peninsulares.

El cuadro que dirige Ernesto Rodríguez es el líder del grupo B, está clasificado para la fase final de ascenso -de momento sólo ha perdido un partido en la liga regular- y unicamente necesita una victoria más para proclamarse campeón absoluto.

Los partidos de esta fase se disputarán en dos pabellones de Calviá que serán elegidos por los organizadores de la fase final, según explicó ayer el concejal de Deportes del Ajuntament de Calviá, Xavier Más.

Por su parte, tanto el presidente del Grupo Jiménez, Jaime Navarro, como su técnico expresaron su optimismo sobre las posibilidades de un plantel «que ha mandado con autoridad en su grupo, con excepción de una derrota en casa la pasada jornada ante el Hospitalet», señalaron.