X. Cruz13/03/05 0:00
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Es el partido del año, no hay duda. Sólo un último encuentro de Liga en el que el Mallorca se jugara la permanencia le privaría de ese privilegio a la cita de esta tarde. Santander es la plaza en la que el equipo de Cúper calibra su verdadero estado de salud, su estado de ánimo. Saben los isleños que una derrota les dejaría atados de pies y manos, con el Racing a siete puntos y la salvación como una utopía. Por eso el mallorquinismo ha subrayado la fecha de hoy, porque sabe que apenas quedarán diez jornadas después de jugar en El Sardinero y porque el calendario que viene no invita al optimismo (Sevilla, Atlético, Deportivo, Betis...). Todo eso ha dado con un partido de primer orden, pese a que Cúper ha tratado de restarle importancia argumentando que se disputan sólo tres de los treinta y tres puntos que quedan por repartir. Es cierto, pero también lo es que una derrota dejaría al Mallorca con los bolsillos llenos de piedras, y que un triunfo les dejaría en disposición de atreverse con la permanencia (El Sardinero, 17.00 horas, PPV).

El partido de Santander va delimitar el terreno. O el Mallorca se queda muy cerca, o se aleja casi de forma definitiva. Al menos del Racing, que se quedaría a siete puntos (más el golaverage) si gana a los rojillos. El conjunto balear quedaría a expensas de la trayectoria del Getafe, que está a cinco puntos pero con un partido menos, el que debe jugar ante el Athletic Club. Por eso el Mallorca ya se ha quedado, de forma definitiva, sin margen para el error. Ganarle a la Real Sociedad fue un alivio, pero de nada servirá si ese triunfo no tiene continuidad esta tarde. En parte, porque el equipo de Cúper se quedaría igual que hace dos semanas pero con dos jornadas menos por disputar y la tragedia empezaría a cobrar forma.

Cúper ha recuperado para el trascendental choque ante el Racing a Farinós, pero sigue sin poder contar con Mark Iuliano, que no se ha recuperado a tiempo y ha quedado fuera de la lista de convocados. Con todo, es muy probable que el técnico argentino mantenga la apuesta de Melo y De los Santos en el círculo central, por lo que Farinós verá el inicio de partido desde el banquillo. Pero Cúper si que tiene previsto darle un nuevo revolcón al equipo, volver a la apuesta del 1-4-4-2. Tuni sería el sacrificado, porque Arango regresaría a la banda izquierda, Cortés al lateral derecho y Ramis actuaría como defensa central junto a Sergio Ballesteros, uno de los fijos en las alineaciones del entrenador de Chabas. Luis García y Romeo seguirán siendo la apuesta ofensiva del Mallorca, que necesitará de su puntería para salir a flote en Cantabria. Mientras, Yosu podrá recuperar para el encuentro a David Aganzo, Regueiro y Juanma, que cayeron de la alineación en Zaragoza por sanción. El preparador cántabro dispondrá nuevamente un equipo formado con tres centrales, en busca de cerrar la hemorragia que sufre el conjunto verdiblanco de cintura para abajo.