Fernando Fernández22/05/05 0:00
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Después de haber asaltado El Plantío (79-81) y haber recuperado el factor pista, el Alcúdia quiere rematar al faena en un segundo partido (20:30 horas) que para el Autocid Ford Burgos es una final. Un todo o nada. La derrota deja la LEB-1 al alcance del equipo de Eloy Doce, que inclinó la balanza de su costado exprimiendo al máximo sus recursos y sacando partido de la corta rotación del banquillo castellano. Oliete cuenta con la seria duda de Chus Pineda, que sufrió un fuerte golpe en el hombro y deja mermado el juego interior de un Burgos que volverá a encomendarse a Tony Smith para mantenerse con vida e igualar la eliminatoria. Pero el estadounidense tendrá que verse las caras con Raúl Mena y Pedro Nuno. El primero está en su mejor momento de la temporada y el portugués le pone cabeza al equipo cuando éste lo precisa.

La presión juega en contra del Burgos, que no esperaba llegar hasta el quinto partido frente al Celso Míguez y mucho menos que la semifinal arrancaría de esta manera, con un Alcúdia mentalmente reforzado y que no está dispuesto a desaprovechar la ocasión. El presidente y el vicepresidente del club, Miquel Ramis y Guillem Alomar, respectivamente, acudirán al palco de El Plantío para animar a sus jugadores y ser testigos del que puede ser un día clave para el futuro de un Alcúdia que acaricia la posibilidad de acceder a la categoría de plata y dar una de las campanadas de las series de ascenso.