Rafael Nadal, en una imagen del entrenamiento que realizó ayer en la pista 10 del complejo de Roland Garros.

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Rafael Nadal no tiene muy claro si va a ser el partido más importante de su carrera. A pesar de su juventud -mañana cumple 19 años- ya ha disputado encuentros de mucha entidad, pero tiene claro que su duelo con Roger Federer va a ser un choque muy bonito. Sus dos enfrentamientos previos se han caracterizado por un tenis de muchos quilates y el manacorí confía en disfrutar de las oportunidades que tuvo en Miami. Dice que el suizo es favorito porque es el número uno del mundo, pero no va a entregar el partido. La final de Roland Garros es su nuevo gran sueño.

Después de terminar su enfrentamiento ante David Ferrer, Rafael Nadal era un tipo «muy feliz». Piensa que «ha sido el mejor partido que he jugado en estos diez días en París. Me sentí muy a gusto en la pista. La derecha y el revés me funcionaron perfectamente, aunque me benefició que David Ferrer llegara cansado del partido que había jugado el día anterior ante Gaudio». Respecto a su duelo de mañana ante el número uno del mundo, Rafael Nadal lo tiene claro.

«Federer es el favorito. Él tiene la presión. Es el número uno del mundo, pero eso no significa que vaya a entregar el partido. Yo trataré de hacer mi mejor tenis y de busca una oportunidad para ganarle». Su empresa va a resultar complicada porque Roger Federer ha pasado el rodillo en los cinco encuentros que ha disputado hasta el momento. «Ojala sea un partido emocionante. Federer todavía no ha perdido ningún set y habrá que empezar por intentar ganarle un set. Lo que está claro es que el partido contra Ferrer me ha dado mucha moral para encarar las semifinales».