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Fernando Fernández|PARÍS
Justine Henin volvió a levantar ayer la Copa Suzanne Lenglen en Roland Garros acabando con el sueño de Mary Pierce en poco más de una hora. La tenista belga, que ha recobrado su mejor tenis tras los problemas físicos que estuvieron a punto de apartarla de la élite, borró de la pista a la jugadora francesa en 62 minutos de juego con un contundente 6-1 y 6-1. Los precedentes entre ambas tenistas dejaban el pronóstico favorable a Henin, que se había adjudicado la victoria en las tres ocasiones en las que se había cruzado con su rival sin ceder ni un set, y Pierce sufrió la presión. A sus treinta años, la tenista gala tenía la que probablemente sea una de sus últimas oportunidades para conquistar uno de los grandes, pero la posibilidad de hacerse con el cetro de la tierra ante sus compatriotas se convirtió en un lastre muy pesado para desplegar su juego.

Pierce era el objetivo de las instántaneas y el centro de atención para los medios. La francesa no paró de conceder entrevistas la jornada previa a la final, mientras que Henin, alejada de las ansias de protagonismo, se dedicó a hablar sobre la tierra, donde no cedió un solo punto de ruptura, presionó a su antojo y desarmó a la francesa desde el principio. La belga pudo ganar su partido 24 consecutivo un poco antes incluso, de no ser por la tímida oposición que Mary ofreció en el sexto juego del segundo set, el más luchado del encuentro. Después del 1-1 de la primera manga, Henin ganó ocho juegos consecutivos para hacerse con el primer parcial en 24 minutos y situarse con 2-0 en el segundo. La jugadora francesa, no podía en momento alguno con el tenis de Henin, y además cometió cinco dobles faltas, algunas de ellas en momentos clave, como la que sirvió para entregar el primer parcial. La grada trató de meter a su jugadora en el partido, pero nadie podía parar ayer a Henin y menos una Pierce cuyo desánimo cundió rápidamente.

Con su victoria de hoy Henin sumó su título 23, el cuarto esta temporada después de los conseguidos en Charleston, Varsovia y Berlín, y el cuarto del Grand Slam: Abierto de EE.UU. (2003), Roland Garros (2003) y Abierto de Australia (2004). Sólo le queda Wimbledon, donde ha sido finalista en el 2001 y semifinalista en el 2002 y 2003 para completar un gran palmarés. Henin se ha convertido en la segunda mujer en la Era Open, cuarta en la historia, en ganar Roland Garros salvando puntos de partido antes. Lo hizo contra la rusa Svetlana Kuznetsova en la cuarta ronda. El año pasado, también la rusa Anastasia Myskina se coronó campeona abortando un punto de partido, igualmente contra Kuznetsova en cuarta ronda.