SON AMAR PALMA: Falasca, Porporatto, Antiga, Freitas, Titarenko y Ruette. Alexis González (líbero). También jugaron Moltó, Vega y Casilla.
VOLLEY LLEIDA: Campillos, Stevovski, Martínez, Lopes, Reis y Peruga. Correa (Líbero). También jugaron Todorov, Jordi y Janeiro.
Àrbitros: Marcos Folgar y Alfonso Ares (A Coruña).
Parciales: 25-9 (19 min), 25-18 (21 min) y 29-27 (32 min).
Amador Pons
El Son Amar Palma está empezando a mostrar el potencial de su sexteto. Coronado en Burgos como campeón de la Supercopa de España, el grupo de Marcelo Méndez sumó un nuevo triunfo en la competición doméstica tras deshacerse ayer en Son Moix del Volley Lleida. Los mallorquines se exhibieron en el primer parcial, aunque las rotaciones provocaron que se sufriera en el tercer set.
Pocas veces puede contemplarse en la Superliga Masculina un resultado tan contundente como el que le endosó el Son Amar Palma al Lleida en el primer set (25-9). Fue un parcial sobresaliente. Todo funcionó a la perfección. Un bloqueo que empieza a recordar la fortaleza del curso anterior, un servicio muy potente, una gran variedad de ataque y una defensa excelente hicieron doblar la rodilla a un equipo que este curso ha sorprendido al Unicaja Almería y al Arona Tenerife.
Marcelo Méndez aprovechó para mover el banquillo y dar minutos a los jugadores que acaban de recuperarse y que a medio plazo pueden ser muy importantes. Moltó, Casilla y Vega saltaron a la pista para reivindicar la amplitud de la plantilla del Son Amar Palma. El encuentro se equilibró algo más, aunque los mallorquines seguían siendo muy superiores.
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