Un partido en donde el tenista de Manacor volvió a ofrecer una
imagen inexpugnable ante un Mardy Fish que parece lejos de la
imagen de promesa estadounidense que enarboló, de la mano de Andy
Roddick, durante algunas temporadas.
Actualmente el tenista de Minnesota figura en el puesto 294 en
la clasificación mundial y en la presente temporada no había ganado
ningún encuentro antes de la cita de Indian Wells, torneo al que
acudió merced a una invitación.
Datos que alentaban una fácil victoria de Rafael Nadal y el
guión se cumplió. Emanacorí tan sólo necesitó de una hora y 28
minutos para pasar ronda, tres minutos más de los que precisó en su
debut ante Jan Hernych.
Como en el choque ante el checo los argumentos del mallorquín,
segundo favorito, fueron similares. Escasos errores no forzados y
la solidez en su servicio, uno de los aspectos en los que al
comienzo de campaña Nadal insistía debía mejorar y que parece que
así ha sido. Ante Fish no cedió ni una sola oportunidad de rotura,
mientras que Hernych tan sólo tuvo una ocasión en este sentido que
no aprovechó.
A todo ello, y como suele suceder en los encuentros de Nadal, se
unió un espectacular arranque que hizo que el primer set se cerrase
en sólo 30 minutos. Ni tan siquiera los seis saques directos de
Fish, que perdió en tres ocasiones su servicio, consiguió dotar de
emoción ese primer set.
Fiabilidad
Tampoco contó con demasiado historia el segundo parcial, donde
únicamente el mayor acierto de Fish con su servicio permitió una
igualdad que se rompió en el décimo juego cuando Nadal logró un
nuevo break que sentenciaba el choque.
Emanacorí pasa página y ahora se medirá a un Grosjean al que ha
derrotado en las dos ocasiones en las que se han enfrentado, aunque
el marsellés ha demostrado en este inicio de temporada cierta
mejoría en su tenis con los cuartos en el Open de Australia y las
semifinales en el torneo de Marsella.
El juego de Nadal sigue en franca progresión y todo apunta que
sus problemas físicos ya forman parte del pasado. Después de
conquistar el torneo de Dubai, el mallorquín ha salvado con
solvencia los dos primeros obstáculos con lo que se ha topado y el
jugador francés se presenta como una buena piedra de toque para
calibrar las aspiraciones demanacorí, que transita por la misma
parte del cuadro que Berdych y Baghdatis.
Más complicaciones encontró en su encuentro de tercera ronda
Roger Federer, que necesitó de una hora y 54 minutos para
deshacerse de un correoso Olivier RochusFederer reaccionó en la
segunda manga y logró igualar de nuevo el partido al doblegar al
belga por un claro 6-2 que daba paso a un tercer set que, por lo
visto hasta ese momento, parecía se iba a decantar con cierta
facilidad del lado suizo.
Federer
Sin embargo, la realidad fue otra. Rochus volvió por sus fueros y
supo aguantar el envite de Roger Federer, que tuvo que recurrir a
todas sus armas para imponerse por un ajustado 7-5.
Su siguiente rival será el francés Richard Gasquet, uno de los
cuatro jugadores que lograron derrotar al tenista helvético durante
la pasada campaña y que en su partido de tercera ronda eliminó a
Dominik Hrbaty. Una jornada en donde el finalista del Open de
Australia, Marcos Baghdatis, vuelve a reclamar su protagonismo y es
que el chipriota no había ganado ningún partido desde la cita
australiana.
En el cuadro femenino, Justine Henin-Hardenne y María Sharapova
volvieron a certificar esa condición con sus fáciles victorias ante
Ai Sugiyama y Sahar Peer, aunque el duelo más destacado era el que
medía a Hingis y Davenport, un clásico del circuito que no se había
registrado desde el regreso de la suiza y la victoria fue para ella
en tres mangas.
Una victoria que permite a Hingis continuar con su buena racha
en la presente temporada y es que en seis de los siete torneos que
ha disputado en la presente temporada, al menos, alcanzó los
cuartos de final. Ahora en su camino por intentar repetir la
victoria que logró en el 98 se medirá a Dinara Safina.
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