Tenía el pasaporte para el Campeonato de Europa prácticamente en el
bolsillo. Brigit Yagüe había hecho los deberes en el Campeonato del
Mundo (subcampeona) y en el Campeonato de España (campeona), pero
quería que no quedaran dudas logrando un buen resultado en el
Torneo Internacional de Holanda. La taekwondista mallorquina
visitaba los Países Bajos con unas pequeñas molestias en el
tobillo, pero logró alzarse con la medalla de plata.
En los días previos a su viaje a Holanda, Brigit Yagüe sintió
molestias en el tobillo. Tenía un poco de líquido y le molestaba
para lanzar las patadas. Pero la mallorquina consiguió atajar los
dolores con un vendaje y decidió desplazarse a Holanda. La
mallorquina lleva varios años instalada en la élite mundial y en la
cita de los Países Bajos partía como favorita. El Torneo
Internacional de Holanda se retrasó y Brigit Yagüe, que competía en
el peso mosca (-51 kg), vió como tenía que afrontar las rondas
finales pasadas las diez de la noche, catorce horas después de
llegar al pabellón.
En las primeras rondas, Brigit logró deshacerse con comodidad de
la representante de Azerbayán y de Australia, y se midió con la
representante de Israel en los cuartos de final, un combate que
daba acceso a las medallas. La mallorquina también logró seguir
adelante y aumentó su moral para intentar subirse a lo más alto del
podio.
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