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Carlos Montes de Oca|VIGO
La plantilla pide calma. La primera derrota de la era Manzano no ha provocado demasiadas consecuencias clasificatorias gracias al triunfo del Getafe ante la Real Sociedad que mantiene al Mallorca por encima del descenso, aunque coqueteando por el peligro. El plantel quiere aislarse de los agoreros, de las voces críticas, para conjurarse en el encuentro del próximo domingo ante el Espanyol en Son Moix, una cita señalada en rojo por todas las plantas de la entidad.

El portero mallorquín Toni Prats, que no mostró la seguridad de partidos precedentes, lamentó los errores defensivos y las oportunidades perdidas: «Los dos goles nos han sorprendido. No jugamos peor que el Celta, tocamos bien el balón, pero nos faltó la fortuna necesaria en los metros finales. Es una lástima porque en actitud y en juego, merecimos más», subrayó el gabellí.

Para Prats, los resultados de la jornada benefician: «No ha sido un mal domingo porque la Real Sociedad ha perdido y Alavés y Espanyol han empatado. De todas formas, nuestros esfuerzos pasan por los cinco partidos que debemos disputar en el estadio de Son Moix, comenzando con el del próximo domingo ante el Espanyol. Jugamos ante rivales de nuestra Liga y son partidos determinantes para aclarar nuestro futuro».

Alejandro Campano, que entró por el lesionado Cortés en el descanso, reconoció la superioridad del rival, aunque también la falta de definición: «Ellos han estado mejor, pero no podemos bajar los brazos. No ha sido nuestro día, pero debemos pasar página y recuperarnos anímicamente. Le pusimos ritmo al partido, pero no pudo ser. Ahora debemos pensar ya en el partido ante el Espanyol».

Víctor Casadesús, que repitió titularidad en detrimento de Pisculichi, no considera demasiado justa la derrota porque «no hubo tanta diferencia entre ellos y nosotros. Faltó concretar las oportunidades porque tuvimos algunas bastante claras».

Uno de los más regulares fue Fernando Navarro, que comenzó como lateral, se situó como central y finalizó de nuevo en su posición habitual: «El míster buscaba profundidad con Tuni y ya está. Yo me siento cómodo en todas las posiciones». Al respecto del choque, apuntó: «Dos errores puntuales nos ha costado el partido. En el primero creo que hubo fuera de juego y en el segundo Tuzzio no llegó a cortar el balón. Pero no falla un jugador, sino todo el equipo».

Para el lateral catalán, el choque del domingo es fundamental: «Debemos rematar la faena ante el Espanyol porque es un partido determinante. La salvación pasa por Son Moix y debemos comenzar esta carrera en el partido siguiente. Son rivales de nuestra Liga y no podemos perdonar si queremos seguir en Primera». La plantilla entrenará esta mañana en tierras gallegas y llegará a la Isla a las siete de la tarde.