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Son Moix es un paraje yermo para el Alavés. El Mallorca se frota las manos echando un vistazo a la trayectoria que ha mantenido el conjunto vitoriano en la capital balear, ya que los blanquiazules sólo han conseguido arañar un empate en sus visitas al estadio municipal y la única vez que abandonaron la Isla con una victoria en el zurrón fue en la campaña 1974-75 cuando ambos equipos militaban en Segunda División. Las estadísticas sonríen a la entidad que preside Vicenç Grande en la cuenta atrás hacia un partido llamado a clarificar la zona peligrosa de la tabla clasificatoria, aunque, como siempre, éstas están para romperse. Los precedentes invitan al optimismo de los mallorquinistas, que han recibido el llamamiento de todos los estamentos del club para tratar de dotar al partido de la atmósfera de final que precisa un envite de estas caracaterísticas.

El Alavés, que pretende resarcirse de su última derrota en Mendizorroza ante el Osasuna por 1-2 después de haber encadenado una interesante racha de resultados positivos, ha visitado Mallorca en un total de once ocasiones con un balance de ocho victorias locales, dos empates y un solo triunfo de los blanquiazules, que han marcado once goles y han recibido 26 en sus desplazamientos a la capital balear. Los vitorianos, que regresaron a la máxima categoría del fútbol estatal el pasado mes de junio, visitaron Mallorca por última vez en la temporada 2002-03, cuando los rojillos se apoderaron de los tres puntos puestos en liza en Son Moix en la novena jornada de Liga por 3-1. Precisamente era la temporada en la que Gregorio Manzano llevaba el timón de la nave mallorquinista, por lo que el preparador jienense ya ha saboreado la sensación de superar a un Alavés que llegará a la Isla rodeado por la incertidumbre que supone enfrentarse a un equipo del presidente y entrenador Dimitry Piterman, que a lo largo del curso ha variado su sistema táctico en multitud de ocasiones.

La campaña 2001-02 fue la más productiva para los vascos, que firmaron tablas sin goles después de haber perdido en las temporadas 1999-00 (2-0) y 1998-99 (2-1). Anteriormente ya se habían sucedido las derrotas para el Alavés, que visitó el Lluís Sitjar por primera vez en la campaña 1968-69.

Sin embargo, su enfrentamiento del próximo sábado en Son Moix a las 18:00 es un duelo a muerte por la permanencia en el que los dos equipos sólo contemplan la victoria, por lo que de poco o nada le valdrán a los protagonistas los números de unos enfrentamientos con los que los bermellones partirían como favoritos a la victoria. El Mallorca, que llega al choque tras empatar en San Mamés, es decimosexto con 33 puntos. El Alavés, tras perder en casa ante Osasuna es decimoséptimo, con 32 puntos, los mismos que el equipo que abre la zona de descenso, la Real Sociedad.