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Vicenç Grande planea un nuevo golpe de efecto. El presidente y accionista mayoritario del Real Mallorca espera hacer efectiva en los próximos días la compra de los títulos que posee el empresario Miquel Vaquer y nombrar vicepresidente del club a Joaquín García, uno de sus hombres de máxima confianza. Grande, que recientemente adquirió los paquetes de la familia Asensio y Francisca March, acentuará de esta manera su poder y control absoluto de la SAD balear.

Miquel Vaquer, que controla un 14'6 por ciento de los títulos, ha expresado a Grande su intención de deshacerse de las acciones y negociar su venta. De hecho, tras el último gran movimiento gestado por el presidente, el peso de Vaquer en el consejo de administración es muy relativo. Activada la operación acordeón, los accionistas deberán hacer frente a una nueva ampliación de capital y todo a punta a que Vaquer no ejercerá su derecho preferente.

Es más, la familia Grande está dispuesta a realizar un nuevo esfuerzo y hacerse con un paquete que pronto tendrá valor cero. Según ha podido saber esta redacción, Grande quiere agradecer a su vicepresidente el esfuerzo que ha realizado durante los últimos años y por eso está dispuesto a pactar un precio por los títulos. Se trata de un caso similar a los de la familia Asensio o Francisca March, si bien la relación entre el presidente y el propietario de Oxidoc siempre ha sido más estrecha.