Víctor Casadesús se refresca durante un entrenamiento celebrado en la ciudad deportiva. Foto: MONSERRAT

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Aunque las quinielas de la pretemporada le señalaban como «un suplente de lujo», a Víctor Casadesús le han bastado un par de meses para transformarse en una de las armas más destructivas del Mallorca. En las últimas semanas, el canterano ha iluminado la carretera hacia el gol y se ha reivindicado como el primer delantero de la plantilla por delante de Maxi y Tristán, que habían iniciado la carrera por la titularidad con una ventaja considerable. El de Algaida, que jugó un papel fundamental en la victoria sobre el Nàstic, reconoce que atraviesa por un dulce momento de forma y que se ve cada día más cerca del once inicial, aunque no se olvida de sus compañeros de ataque e insiste en que ellos también tienen mucho que ofrecer.

Víctor acudió al rescate del Mallorca en la Copa y desde entonces su aportación se ha disparado. Sus dos goles consecutivos en el campeonato y una capacidad innata para generar peligro le han devuelto la confianza y le han instalado de nuevo en la primera línea. «Cuando llevas cero goles siempre juegas un poco presionado, pero marqué contra el Athletic, repetí la semana pasada contra el Barça, volví a hacerlo contra el Nàstic...», recuerda el futbolista. «Cuando eso pasa te quitas un poco de encima presión y todo ayuda. De todas formas, creo que que hay mucha competencia en el vestuario y que tanto yo como el resto de los delanteros estamos capacitados para marcar. En ese sentido, todos somos buenos», añade.

El jugador mallorquín cree que algunas de las críticas que se han vertido ultimamente sobre los atacantes están justificads, aunque está convencido de que el triunfo ante el Nàstic marcará un punto de inflexión en la travesía mallorquinista: «La verdad es que se nos ha dado bastante caña y con razón porque éramos incapaces de marcar, pero no nos sentíamos agobiados por eso, sino porque el equipo los necesitaba y se resentía. Es verdad que puede marcar todo el mundo, pero ésa es nuestra misión, la de los delanteros, y de momento no llevamos muchos goles. En ese caso sientes la responsabilidad de ayudar al equipo, aunque parece que eso ha cambiado», argumenta esperanzado. «No se a qué se debe, pero estaba claro que tenía llegar un jornada así porque cada semana generamos muchísimas oportunidades. Creo que estamos en un punto muy importante y que a partir de ahora iremos hacia arriba, que las ocasiones entrarán. Al menos eso es lo que espero». Víctor atribuye ese incremento de protagonismo a la continuidad que le ha proporcionado Manzano en los últimos tiempos: «Un delantero vive su mejor momento de forma cuando marca goles y yo ahora tengo la suerte de hacerlos. Hasta el momento sólo había entrado de inicio en dos jornadas y después volvía a salir del equipo a la semana siguiente, pero después de lo del domingo tengo otra vez la ilusión de volver a jugar contra el Celta. No obstante, la decisión la tiene que tomar emíster, ya que fisicamente estamos todos muy bien y puede jugar cualquiera. Es verdad que en estos momentos me siento más titular que otras jornadas, pero no al cien por cien porque igual que he entrado en el once puedo salir».