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Agencias|SEVILLA
5 de febrero de 2006. Osasuna gana 0-1 en el Ramón Sánchez Pizjuán gracias a un gol de Savo Milosevic. Desde aquella fecha, hace prácticamente un año, el Sevilla ha sido incapaz de doblar la rodilla en su estadio. Presenta unos números de museo ante su hinchada: catorce victorias y dos empates en los dieciséis últimos encuentros de Liga disputados en Nervión. Y es que el Mallorca visita al mejor equipo del torneo como local. El grupo de Juande Ramos muestra una tarjeta inmaculada, con ocho victorias en otros tantos partidos. Por el Pizjuán ya han desfilado equipos como Valencia, Real Madrid, Deportivo...y todos han perdido. El Getafe plantó cara (1-0) y la mayoría han caído con estrépito. Cuatro al Levante, tres al Valencia, otros cuatro al Depotivo. Asusta. Tampoco la estadística general favorece al Mallorca, que sólo ha ganado en dos de sus visitas ligueras al campo del Sevilla. Más concretamente, esos dos triunfos del cuadro balear se produjeron en las campañas 60-61 (0-2) y 99-00, éste último por un contundente 0-4 con goles de los sevillanos Carlos Domínguez y Diego Tristán.

Por contra, la historia muestra un total de trece victorias sevillistas, además de seis empates entre ambos equipos, incluido el del año pasado, cuando el marcador final registró un resultado de 1-1, gracias a los tantos anotados por Saviola y Okubo. En cuanto al número de goles marcados por uno y otro equipo en estos partidos, el Sevilla lleva anotadas hasta este momento treinta y cuatro dianas por tan sólo quince del Mallorca. Por otra parte, destacar que el portero del Sevilla Andrés Palop comentó ayer que el conjunto nervionense no se puede «permitir el lujo de volver a pinchar en Liga», si quiere mantener su lucha por el liderato que ostenta actualmente. Y es que Palop espera ya con ganas el partido de mañana ante el Mallorca. «Para nosotros siempre es un aliciente ganar en casa ante nuestra afición. Si queremos estar arriba no podemos permitirnos el lujo de volver a pinchar en la Liga», dijo.

De hecho, el meta no se fía del Mallorca, pese a la crisis en las que se encuentran los baleares. «Viene un equipo que no pasa por su mejor momento, pero eso hace que venga herido, y con ganas de sacar algo positivo del Sánchez Pizjuán. Pero queremos lograr la primera victoria de 2007, ya que no hemos ganado aún en Liga ni en Copa y, sobre todo, no escaparnos de la posición de arriba», añadió. Palop, que ya se ha recuperado de sus problemas físicos, insistió en el efecto negativo que tendría un revés ante los mallorquines. «Cuando empiezas el año y pierdes, de la manera en la que perdimos la semana pasada, está claro que ahora, si se vuelve a perder, sería malo para nosotros, porque los rivales se siguen acercando. Cometimos el error de fallar en Zaragoza, y no nos podemos permitir el lujo de volver a hacerlo, porque el colchón de puntos que habíamos sumado se comprimiría mucho más», explicó.