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Efe|SYDNEY
El mallorquín Carlos Moyà avanzó ayer a la final del Internacional de Tenis de Sydney al derrotar al sexto favorito, el francés Richard Gasquet, por 6-3, 4-6 y 6-2, en una hora y 46 minutos, en la pista central del Parque Olímpico de esta ciudad. Moyà se enfrentará hoy en la final al defensor del título y tercer cabeza de serie, el estadounidense James Blake, que ganó sin jugar por incomparecencia del austríaco Jurgen Melzer, el otro semifinalista del evento. Melzer no se presentó a jugar aduciendo problemas estomacales después de haber ingerido una comida japonesa que, al parecer, estaba contaminada. Será la tercera final de Moyà en Sydney, tras perder en ediciones anteriores con el británico Tim Henman y el australiano Lleyton Hewitt, contra este último por lesión en un tobillo que le impidió seguir jugando. Moyà comenzó jugando un muy buen tenis y dominando a un francés que nunca encontró el ritmo del partido. El mallorquín rompió el saque del galo en el segundo juego, y aunque Gasquet hizo lo propio en el cuarto, el español volvió a controlar la contienda rompiendo el de su rival en el quinto.

En la segunda manga, nuevamente Moyà comenzó dominando y quebrando el servicio de Gasquet en el cuarto juego, pero una remontada del francés y un repentino bajón del español permitió que el galo rompiera el saque del mallorquín en el quinto y noveno para asegurarse dicha manga. Pero en el tercero volvió a aparecer toda la experiencia y oficio del español, que rompió el saque de Gasquet en el cuarto juego y, desde ese momento, tomó total control del partido. Repitió ruptura en el octavo y se aseguró así el triunfo y una plaza en la final de hoy sábado.

El mallorquín considera que puede ser un rival «peligroso» para el estadounidense. «Si estoy bien mentalmente, el físico aguanta y el saque y la derecha funcionan como hasta ahora, puedo ser un rival peligroso», dijo a EFE tras imponerse en semifinales al sexto favorito. Moyà busca su primera victoria en Sydney después de perder dos finales de este torneo en ediciones anteriores. «Esta vez me enfrento a un jugador muy duro y uno de los mejores del mundo, que, además, llega con mucha confianza. Pero yo me siento confiado y saldré a buscar el triunfo», manifestó Moyá sobre Blake, que volverá a ser su rival en la primera ronda del Abierto de Australia. Sobre su pase a la final de Sydney, el mallorquín admitió su sorpresa: «Creo que es increíble, no pensé que estaría en la final. En las dos primeras rondas salvé puntos de partido -cinco contra Verdasco- y ayer iba un saque abajo en el tercer set y Baghdatis sacaba para ganar. Creo que el de hoy fue el partido más cómodo, aunque Gasquet fue un rival muy duro».