La inspiración local fulmina al Levante

VALENCIA: Cañizares (*), Miguel (*), Albiol (*), Ayala (*), Curro Torres (*), Angulo (**), Albelda (**), Baraja (-), Silva (**), Morientes (**)y Villa (*).
Cambios: Marchena (*) por Albelda, Hugo Viana (**) por Baraja y Joaquín (*) por Moriente.

LEVANTE: Molina (*), Descarga (*), Alvaro (*), Alexis (*), Rubiales (*), Berson (*), Diego Camacho (*), Ettien (**), Riga (*), Courtois (*)y Nino (*).
Cambios: César (*) por Àlvaro, Robert (*)por Rubiales y Reggi (*) por Nino.

Àrbitro: González Vázquez. Amonestó a Ayala, Curro Torres, Albelda, Diego Camacho, Alexis, César y Ettien.

Goles:
1-0, minuto 51, Hugo Viana.
2-0, minuto 55, Morientes.
3-0, minuto 79, Ayala.

Efe|VALENCIA

Dos goles en cinco minutos de inspiración al principio de la segunda mitad, cuando el partido estaba más frío y desangelado que nunca, encauzaron el triunfo del Valencia en el derbi ante el Levante, que tuvo un primer tiempo igualado y un segundo periodo de superioridad local. El Levante no dejó maniobrar al Valencia hasta el descanso, pero tras la lesión de Alvaro y los goles de Viana y Morientes al comienzo de la reanudación, el partido se le puso de cara al equipo local, que obtuvo un triunfo solvente al que contribuyó Ayala con el tercer tanto local. La última media hora de partido fue de superioridad valencianista que, con el marcador a su favor, demostró una gran experiencia para imponer su juego y llevar el partido por donde más le convenía y obtener una justa victoria.

El partido dio comienzo con un Levante muy presionante, lo que limitó la capacidad creativa del Valencia, que sólo a duras penas y tras quince minutos de juego logró marcar el ritmo. Lo hizo a ráfagas, puesto que el equipo visitante demostró tener las ideas claras y muy estudiado a su rival, además de conseguir con cierta comodidad que la pelota estuviera en su poder e impedir que los jugadores clave del Valencia dispusieran de opciones para demostrar su capacidad, aunque sin crear peligro ante la meta rival.

En el minuto 30, tuvo que ser sustituido Baraja por lesión y con Hugo Viana en su lugar, al conjunto local le faltó mordiente, mientras que el Levante supo llevar el partido al descanso de la forma que más le convenía. La segunda parte empezó muy fría, sin intensidad y con una grave lesión del levantinista Alvaro a los cinco minutos. En el minuto diez, sin embargo, el marcador ya era de 2-0. Un remate colocado con la derecha del zurdo Hugo Viana y una acción de oportunismo de Morientes pusieron distancias entre ambos conjuntos, sin que apenas se hubieran producido argumentos futbolísticos para ello. El partido cambió puesto que el Valencia se encontró, de pronto, cómodo sobre el terreno de juego, el público despertó y decidió animarle, al tiempo que empezaron a verse huecos en la zaga forastera. A diez minutos del final, un cabezazo de Ayala puso el 3-0 en el marcador, lo que premió la confianza del equipo en sus posibilidades y castigó quizá con excesiva dureza al Levante.