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Fernando Fernández
«Tengo hambre de baloncesto», decía minutos después de aterrizar en Son Sant Joan la última pieza del engranaje del Palma Aqua Mágica. Ken Lacey (Strousbrug, EEUU, 1978) tenía ganas de jugar en España y uno de los grandes de la LEB le brinda la ocasión de hacer realidad uno de sus sueños. Pese a estar parado por una tendinitis durante los tres últimos meses, el pívot estadounidense -con pasaporte irlandés- ha pasado sin problemas la revisión médica y se ejercitó de manera leve junto a algunos de los que serán sus compañeros, al menos por espacio de estos días en los que estará a prueba. La primera impresión ha sido «buena», en palabras del director deportivo de la entidad, Sunil Bhardwaj, aunque será hoy cuando, después de haber descansado y entrene con la totalidad del plantel, cuando se puedan calibrar sus opciones en vistas a prolongar su compromiso con el Aqua Mágica hasta el final de la presente temporada. Si convence, Lacey, de 2,08 de altura y con referencias en Italia (Bolonia, Milán, Scavolini...) y Grecia (Dafni) viajará a Hospitalet y se integrará a la disciplina del Palma.

De hecho, Jareño destacó varias cualidades de Ken Lacey tras el encuentro ante el Tarragona 2016. El preparador madrileño le definió como un jugador que puede desarrollar una gran labor en defensa, poco brillante en faceta anotadora, y cuya misión será la de frenar al jugador de referencia del cuadro rival. «Haré lo que el entrenador diga, estoy a sus ordenes. Si dice eso, trabajaré para demostrar que puedo hacerlo bien. Es bueno saber lo que se quiere de uno, pero lo importante es hacerlo en la pista. Es verdad que puedo defender bien, pero también soy capaz de desarrollar otras facetas del juego que pueden ser útiles para el equipo. He venido para ayudarles y haré lo que me ordenen», significó Jareño.

Lacey confesó que tenía «ganar de militar en el baloncesto español. Hubo algunas oportunidades, pero al final no se pudieron concretar. Ahora sí, y espero que pueda quedarme en el Aqua Mágica. Para eso he venido», afirmó el interior, que reforzará una parcela en la que Chris Massie es la referencia, Shalawn Miller y Santi Toledo dos complementos y DeMarco Johnson -el último fichaje del club- un refuerzo que no acaba de tener continuidad por diversos problemas físicos que han mermado su potencial. Sus referencias sobre el equipo son escasas, «he visto que en la liga van muy bien y ganaron el último partido. Me gustaría poder ayudarles a seguir así o mejorar, porque sé que quieren ascender a la ACB, y eso es una motivación añadida», explicó Lacey, quien viene dispuesto a convencer a Àngel González Jareño de que puede tener un hueco en el vestuario de Son Moix a lo largo de los días en los que estará a prueba. «Estoy muy excitado, vengo de una larga inactividad y tengo muchas ganas de volver a jugar, es como si tuviera diez años menos», comentó el jugador, de 28 años de edad, quien tiene ganas de «poder demostrarle al entrenador que puede contar conmigo».