TW
0

Efe|BARCELONA
El vigente campeón y actual líder del Mundial de la categoría de 250 centímetros cúbicos, el mallorquín Jorge Lorenzo, aseguró que afronta el Gran Premio de Catalunya «sin ganas de revancha ni una presión excesiva» después de su reciente caída en el circuito de Mugello durante la disputa del Gran Premio de Italia, en el que se fue al suelo tras intentar adelantar al también español Àlvaro Bautista, al que el domingo acusó de no haber jugado «limpio». Lorenzo no quiso avivar la polémica respecto al incidente y dijo que quiere «olvidar» la carrera en Italia para centrarse en ganar en Montmeló. «Lo que quiero es seguir la racha de victorias que llevaba y ganar por primera vez en este circuito. Le tengo mucho cariño a este circuito, no le guardo rencor a pesar de haberme roto alguna clavícula y alguna muñeca, y me hace mucha ilusión esta carrera», explicó. «Es el circuito donde más me he caído, pero también donde corro más rápido y eso lo compensa. Parece mentira, pero esta carrera me hace más ilusión cada año», manifestó el piloto mallorquín del Fortuna Aprilia, quien ayer asistió en Barcelona a la presentación del Gran Premi de Catalunya junto a otros pilotos del Mundial, como los catalanes Toni Elías (MotoGP) y los hermanos Aleix y Pol Espargaró, que compiten en 250 y 125 centímetros cúbicos, respectivamente.

El pupilo de Dani Amatriaín también recordó su segundo puesto el año pasado en Montmeló, cuando le ganó el italiano Andrea Dovizioso por tan sólo 95 centésimas, y expresó sus ganas de conquistar por primera vez el territorio catalán para enseñar de nuevo la bandera con la leyenda 'Lorenzo's Land'. «Ojalá pueda clavar la bandera que tanto me gusta clavar en los circuitos, aunque algunos piensen que es absurda», señaló. Toni Elías, por su parte, manifestó que correr «cerca de casa, de la familia y de los amigos, delante de toda la afición, siempre te da un plus de motivación», y dijo estar satisfecho a medias de su trayectoria este año, en el que marcha octavo, ya que está siendo «competitivo» en los entrenamientos, pero ha tenido «algunos errores» en las carreras. Además, reconoció que no está prevista ninguna mejora en su moto.

Mientras, Pol Espargaró también se mostró muy ilusionado ante su segundo Gran Premi de Catalunya. El año pasado, se convirtió en el piloto más joven en puntuar en el Mundial y, este año, espera «ser también el más joven en algo más», dijo, expresando su ambición por subirse al podio en Montmeló, nunca mejor dicho corriendo en casa, ya que nació a unos pocos kilómetros del circuito, en la población vecina de Granollers. El Gran Premio de Catalunya confía en superar la asistencia de público de la edición de 2006, presenciada en directo por 107.100 espectadores, y batir así su propio récord de asistencia, según confirmaron los responsables del circuito durante la presentación del Gran Premio en el puerto olímpico de Barcelona.