La selección de Rusia se impuso (61-53) en la pelea por el liderato del grupo A del Eurobasket a Grecia, que fue a remolque durante los 40 minutos de un partido marcado por la fortaleza física en defensa y por la desaparición colectiva de las estrellas griegas, entre las que sólo sobresalió Vassilis Spanoulis (12 puntos).
A Rusia se la espera para disputar las eliminatorias finales por el título. Tiene jugadores de nivel, ha realizado un juego meritorio en la primera fase y ante Grecia, subcampeona del mundo y selección que exprime al rival al máximo, cumplió con creces, a pesar de no realizar un juego especialmente brillante -en ningún cuarto ninguno de los dos equipos superaron los 20 puntos- y de su bajo porcentaje de tiro (20/59 en tiros de campo: 33 por ciento).
Además, las noticias positivas no se terminan ahí para los rusos. Después de tres partidos, se puede afirmar que Andrei Kirilenko (12 puntos y 17 rebotes) y JP Holden (17 puntos y máximo anotador) tienen una alternativa en el apartado de anotación, el alero de Chicago Bulls Viktor Khryapa (13 puntos y 5 rebotes) y eso que a 7 minutos para el final fue eliminado por cinco faltas personales.
La última alegría para el equipo dirigido por David Blatt fue su aguante mental, ya que no se descompusieron por la paulatina aproximación en el marcador de los helenos (47-45, min.36), quienes no pudieron culminar la remontada debido al escaso aporte de sus hombres grandes-Papadopoulos y Vasilopoulos se quedaron sin anotar.
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