Los 'chicos de oro', a la conquista de Europa

Los chicos de oro desean añadir una muesca más en su palmarés. Japón sigue en el más vivo de los recuerdos, y ahora, quieren que sea en Madrid, en casa, donde puedan celebrar un nuevo título. Pekín, dentro de menos de un año, sería el tercer reto para cerrar un ciclo de éxitos.

España es favorita, tanto como por el hecho de ser la anfitriona como por potencial. Sólo el despiste ante Croacia impide que llegue invicta a la final, pero la estadística dicta que de los últimos 34 encuentros, sólo ha cedido una vez y por un punto.

Además, demostró carácter y cabeza fría para soportar la dura semifinal con Grecia y con el apoyo del público tiene grandes esperanzas de tomarse la revancha de Suecia hace tres años y romper su maldición en las finales continentales donde hasta ahora ha perdido las cinco que ha disputado.

Pero antes, el combinado nacional deberá superar a Rusia, un rival al que ya derrotó en la segunda fase por 69-81 y que vuelve, 14 años después, a disputar una gran final en un Europeo, y espera volver a reinar después de que lo hiciese ya hace 25 años, bajo la denominación de la URSS. Los españoles no pierden en partido oficial con los rusos desde los Juegos de Sydney, pero tampoco se ha visto nunca en la tesitura de una final contra ellos.

Ahora, bajo el mando de David Blatt, ya no son tan anárquicos, cuentan también con una buena generación de jugadores y han firmado un buen torneo pese a que nadie contaba con ellos perdiendo sólo contra los de'Pepu' Hernández.

España quiere estrenar su palmarés reinando en el Viejo Continente. España no sabe lo que es ganar un Europeo aunque lo haya rozado en varias ocasiones, pero hoy tendrá en Rusia al rival para seguir haciendo historia y lograr un título, que aún no luce en sus vitrinas.

Cinco han sido las finales que han disputado los españoles a lo largo de la historia del Europeo y cinco son los subcampeonatos que figuran en el palmarés nacional. En la primera edición de un Europeo, el celebrado en Ginebra en 1935, España se metió en la final, pero acabó perdiendo ante Letonia. Deberían pasar varios años para volver a estar luchando por el título, en 1973 sería Yugoslavia, en pleno inicio de la hegemonía del baloncesto balcánico, los que dejarían a los españoles sin el oro, en un Eurobasket que se celebró en Badalona.

Más recientes son los últimos tres antecedentes. Italia sería el verdugo de España en 1983 y 1999, ambas ediciones disputadas en suelo francés, donde la azzurra se colgó la presea dorada ante los españoles. Sin embargo, el recuerdo más próximo y el más amargo es el de hace cuatro años. Lituania, liderada por Sarunas Jasikevicius, que también se encuentra dirigiendo a los suyos en Madrid, y por un desconocido en ese momento Macijauskas, dejaron a la España de los «Juniors de oro» sin la presea dorada, en un partido donde los nacionales nada pudieron hacer ante la calidad lituana.